Informe: El «autoritarismo digital» está en auge
La libertad en la web está en declive y los datos advierten del crecimiento de métodos gubernamentales para controlar información de los ciudadanos
La libertad en internet está en declive por octavo año consecutivo, según el reciente informe de Freedom House. Los datos del último año advierten de que el «autoritarismo digital» está en auge, camuflado detrás de la guerra contra las «fake news», con los gobiernos ejerciendo más control sobre la información personal y frustrando el disentimiento en línea.
«A lo largo del año, los autoritarios utilizaron afirmaciones de ‘noticias falsas’ y escándalos de datos como pretexto para acercarse al modelo de China», explica el documento de Freedom House, un centro de investigaciones en pro de la democracia. Pone como ejemplos los esfuerzos en el campo digital de gobiernos como Egipto, Irán y Rusia.
Egipto e Irán aplicaron las leyes restrictivas de la prensa a las redes sociales, encarcelaron a críticos con medidas diseñadas para combatir las «fake news», y bloquearon el acceso a servicios y redes sociales de otros países. También empieza a ser común que los gobiernos exijan a las empresas almacenar datos localmente, para tenerlos más accesibles.
El estudio evaluó el comportamiento de 65 países, de los que 26 acusaron una disminución general de la libertad digital desde junio de 2017, y solo 19 registraron mejoras netas. Los mayores descensos en la puntuación tuvieron lugar en Egipto y Sri Lanka, seguidos por Camboya, Kenia, Nigeria, Filipinas y Venezuela.
La excusa de las «fake news» ayuda al autoritarismo
En EEUU, donde las preocupaciones acerca de la libertad en internet han crecido bajo el mandato de Donald Trump, también cayó la puntuación. La legislación que tumbó la neutralidad de la red fue el principal culpable de la bajada, además de la desinformación que ha tomado protagonismo conforme se acercan las elecciones de medio término.
De los países analizados, 17 han adoptado leyes para regular las redes sociales y la comunicación online, y 13 han encausado a ciudadanos por presuntamente divulgar información falsa. Al mismo tiempo, China envía equipo y entrena a cada vez más gobiernos, que se encaminan a adoptar su óptica prohibitiva en la esfera digital.
Otro país preocupante para Freedom House es India, donde se ha cerrado o limitado el acceso a internet como respuesta a crisis sociales que involucraron asesinatos y tensión en las calles. «Quitar el servicio de internet es una respuesta draconiana, particularmente en un momento en el que los ciudadanos más lo necesitan», lee el informe.
«Si bien el contenido deliberadamente falso es un problema genuino, algunos gobiernos utilizan cada vez más la excusa de las noticias falsas como un pretexto para consolidar su control sobre la información y suprimir la disidencia», agregan los investigadores.
«Internet se ha convertido en la esfera pública moderna», y empresas como Facebook y Google tienen «una gran responsabilidad para garantizar que sus plataformas sirvan al bien público». De lo contrario, «a los ciudadanos se les negará un foro para articular valores compartidos, debatir cuestiones políticas y resolver disputas», concluyen.