Influencers de ‘fitness’ y nutrición: un mundo de bulos
Tras analizar sus contenidos, los investigadores de la Universidad de Glasgow concluyen que el 88% de los influencers de 'fitness' y nutrición mienten
Los likes se encarecen conforme más civiles intentan dar el salto a la fama en internet, saturando el mercado de las redes sociales y atizando la competencia entre personalidades digitales. Y, como en cualquier otro negocio, hay personas que harían prácticamente cualquier cosa con tal de sobresalir. El marketing de influencers es prueba de ello, siempre encontrando formas de superarse a sí mismo.
No basta con el mercado negro de likes y seguidores, simular patrocinios para llamar la atención de las marcas, o hacer pasar por contenido original lo que a todas luces es publicidad pagada. Grosso modo –es importante resaltar que, como en todo, hay también actores positivos–, el universo de los influencers también puede acabar siendo una afrenta para la salud pública, como ya pasa con los anti-vacunas.
Pero incluso fuera de la burbuja de las teorías de conspiración (que no solo comprende anti-vacunas, sino también terraplanistas o negacionistas de la llegada a la Luna, entre otros) hay algunas corrientes virtuales que inducen a las personas a error con su propia salud. Por ejemplo, el popular sector de los influencers de fitness, nutrición, salud y deporte es un imán de bulos, según los expertos.
Más del 88% de los influencers que dan consejos sobre dieta y fitness están errados. Es decir, ocho de cada nueve de estos –en muchos casos, autoproclamados– gurús de la salud y el bienestar hacen recomendaciones que no tienen respaldo científico ni son avalados por las comunidades de profesionales que se dedican formalmente a estas áreas. En palabras sencillas: una sugerencia loable es ignorarles.
«Los influencers deben cumplir con requisitos médicos y científicos»
Un equipo de investigadores de la Universidad de Glasgow se dio a la tarea de compilar y verificar los contenidos de los influencers de fitness y nutrición del Reino Unido. Los requisitos para ser objeto de análisis eran tener más de 80.000 seguidores en al menos una red social, estar verificados por dos webs, y tener una plataforma constantemente actualizada sobre control de peso. No fue difícil encontrarles.
Precisamente, los científicos concluyeron que tan solo uno de cada nueve influencers de fitness proveen información precisa y confiable. «La mayoría de los blogs no podrían considerarse fuentes creíbles de información sobre control de peso, ya que a menudo presentan opiniones como hechos y no cumplen con los criterios nutricionales del Reino Unido», explicó la directora de la investigación, Christina Sabbagh.
«Esto es potencialmente dañino, ya que estos blogs llegan a una audiencia muy amplia», añadió la experta. Los investigadores basaron el estudio en 12 criterios para definir la veracidad de los contenidos de estos populares influencers, entre ellos si los contenidos tenían el respaldo de evidencia científica, si hacían sentido para el gremio de nutricionistas, y si sus recetas eran realmente sanas.
Para aprobar el examen debían tener una calificación de al menos 70 sobre 100 en el balance de estos 12 criterios. La mayoría de los influencers de fitness y nutrición suspendieron. Uno de los datos más llamativos es que ninguno de los «gurús» analizado compartió una sola receta de un platillo avalado por las normas de límites calóricos del Reino Unido. El único influencer que aprobó es nutricionista.
En conclusión, los influencers de internet no son fuentes creíbles en el control de peso. «La popularidad y el impacto de las redes sociales en el contexto de la epidemia de la obesidad sugiere que todos los influencers deben cumplir con los requisitos médicos y científicos para poder asesorar sobre control de peso en línea», dicen los investigadores, según recoge el diario The Independent.