Así planea Google acabar con los bloqueadores de anuncios de YouTube
La empresa pretende acabar de raíz con las plataformas de terceros que permiten a los usuarios disfrutar de YouTube sin anuncios
A lo largo de las últimas dos décadas, el poder que han ganado las plataformas de internet se ha multiplicado exponencialmente, hasta el punto de llevar a algunas empresas online a desbancar a los gigantes que llevaban años en la cúspide de la pirámide. Y es que las plataformas online encontraron en la presencia de publicidad la forma perfecta de crecer y, ya de paso, hacerse de oro por el camino.
Sin embargo, son tantas las herramientas que internet pone al alcance de los usuarios, que hasta ahora era relativamente fácil evitar esa publicidad en casi todas las plataformas. Sin ir más lejos, para sitios web como YouTube, existen infinidad de herramientas como AdBlock, que permiten a los usuarios evitar los anuncios antes y durante los vídeos. Una costumbre con la que desde Google quieren cortar por lo sano.
Google arranca una guerra contra las vías para evitar la publicidad
Una guerra en la que Google quiere imponer su propia forma para disfrutar del contenido de YouTube sin anuncios: YouTube Premium, opción para disfrutar de una experiencia sin anuncios, la cual, como resulta evidente, requiere el pago de una suscripción. Es por ello que Google quiere acabar con todas las vías que permiten a los usuarios saltar esta publicidad. Y tal y como han asegurado en un comunicado, comenzarán por las aplicaciones de terceros.
Es importante remarcar que, más allá de las extensiones de distintos navegadores, existen aplicaciones de terceros a través de las cuales los usuarios pueden acceder a plataformas como YouTube, evitando las barreras publicitarias. Unas alternativas con las que Google ha empezado una cruzada este mismo 2024, argumentando que la publicidad en YouTube es la única forma de que los creadores moneticen su contenido.
Desde Google, argumentan que estos beneficios son el principal factor que permite a los creadores continuar con la realización de sus vídeos. Pero es que, más allá de eso, el modelo de negocio de Google se basa en los anunciantes, lo cual también engloba a YouTube, por lo que cuando la publicidad es bloqueada por factores externos, los ingresos de la compañía también se ven resentidos, motivo que ha llevado a Google a lanzar esta ofensiva.
Una ofensiva que ya se ha puesto en marcha, y aquellos que acostumbren a utilizar alguna de estas aplicaciones de terceros, ya habrá podido comprobarlo, encontrándose con problemas como un mayor tiempo de carga en los vídeos, todo tipo de problemas a la hora de cargar el contenido que estaban preparados para ver o, en los casos más extremos, un mensaje de error que avisa sobre el uso de estos bloqueadores, haciendo una oposición frontal a esta práctica.
Una guerra en la que Google está desplegando todo su arsenal para poner fin a las prácticas más comunes en lo que respecta al uso de todo tipo de herramientas que busquen ‘engañar’ a plataformas como YouTube, evitando la presencia de los anuncios. Aún está por ver la respuesta de los internautas a estas medidas, ya que es solo cuestión de tiempo que las plataformas más usadas para disfrutar de YouTube sin anuncios desaparezcan. ¿Seguirán creando fórmulas nuevas para seguir llevando a cabo esta práctica?