Facebook desmiente la ‘censura’ de mensajes en Whatsapp
La red social dice que no limita el reenvío de mensajes en función de su contenido: "WhatsApp ni ve, ni modera, ni censura"
La semana pasada WhatsApp redujo el número de veces que se puede reenviar un mismo mensaje dentro de la plataforma en un intento más por frenar la difusión de bulos, rumores e información falsa.
Esta medida se adoptó por primera vez hace ahora un año, cuando el reenvío masivo de bulos y de información son contrastar llegó a provocar situaciones dramáticas en países como India.
Según WhatsApp —y aunque limitar el reenvío de mésales es una medida de eficacia limitada— al reducir el reenvío a cinco destinatarios simultáneos la plataforma de mensajería consiguió reducir «en un 25 % en el reenvío de mensajes a nivel mundial».
Ahora, la semana pasada, Whatsapp redujo el reenvío del un mensaje previamente reenviado a un único destinatario o grupo, de una vez. Lo que no impide reenviar el mensaje a diferentes destinatarios por separado, ni enviar el mismo contenido como un nuevo mensaje (por ejemplo, copiando y pegando el texto).
Esto porque ni Facebook ni Whatsapp conoce el contenido de los mensajes que se envían cifrados («protegidos») entre los usuarios. Tal y como explicaba hace unos días la CNN, precisamente por este motivo Whatsapp «es un problema» para la lucha de Facebook contra la desinformación y la difusión de bulos: «La propia WhatsApp no supervisa el flujo de mensajes en la plataforma».
De modo que Whatsapp únicamente contabiliza las veces consecutivas que se reenvia determinado mensaje —observando su identificador único, no su contenido— entre usuarios y en un determinado plazo de tiempo.
«El nuevo límite global reduce el número de veces que se pueden compartir mensajes frecuentemente reenviados», explican desde Facebook. «Este límite se aplica automáticamente y no guarda relación alguna con el contenido del mensaje —que WhatsApp ni ve, ni modera, ni censura— porque todos los mensajes y llamadas de WhatsApp están protegidos con un cifrado de extremo a extremo». No tiene que ver, por tanto, con los verificadores de información.
Las entidades de verificación son ajenas al funcionamiento de Whatsapp
A pesar de esto el pasado fin de semana se difundió por Twitter la afirmación de que Whatsapp limitaba la difusión de mensajes si su contenido era considerado como «información falsa» por parte de las entidades de verificación que usa Facebook en España, entidades que no participan en la medida de limitar el reenvío de mensajes.
Estas entidades de verificación revisan información que circula por Whatsapp —y que les hacen llegar los propios usuarios— para verificar su contenido en caso de que los usuarios tengan sospechas o dudas sobre su veracidad, o porque sospechen de su falsos. Estas entidades se limitan a verificar y si acaso a publicar los resultados de su análisis.
Pero ninguna de las entidades de verificación —más de un centenar en todo el mundo, según Facebook— participan en la infraestructura de Whatsapp ni tienen posibilidad interventora en la difusión de estos mensajes. Únicamente son verificadores «externos e independientes» —a efectos de Facebook— de información.
Y en lo que a la veracidad de la información se refiere en última instancia corre por cuenta de cada uno sacar sus propias conclusiones y hacer sus propias verificaciones; o aceptar, o no, las verificaciones de terceros.
«El nuevo límite de reenvío (…) no está relacionado de ninguna manera con las organizaciones de verificación ni con la ‘censura’, y cualquier afirmación que sugiera lo contrario es 100% falsa», dice Facebook.