Derecho al Olvido: ¿Cómo deshacerte de tu historial digital?

Dentro de todos los aspectos cuyo conocimiento se antoja imprescindible al hacer uso de las herramientas que internet nos ofrece, la huella digital es uno de los más importantes. A grandes rasgos, se trata de un rastro de datos que todos los usuarios dejan en la web al navegar por cualquier rincón de internet.

Esto incluye prácticamente todo lo que hacemos en internet: desde las webs que visitamos hasta los correos que enviamos. Todo ello puede ser rastreado de forma digital, ya que, de forma activa o pasiva, y en muchas ocasiones sin saberlo, estamos creando una huella digital, ya sea publicando una foto en Instagram o aceptando las cookies de una web. Pero, ¿dónde están los límites de este rastreo?

El derecho al olvido, el mecanismo con el que hacer frente a la huella digital

Es importante remarcar que a la gran mayoría de esta huella digital solo puede acceder un círculo restringido. Por ejemplo, a tus datos médicos disponibles en la base de datos de un centro de salud solo puede acceder el personal sanitario de dicho centro. No obstante, en lo relativo a otros aspectos, como por ejemplo las fotografías o datos personales difundidos por la red, existe una frontera algo más difusa.

Se ha dado en cientos de ocasiones una situación en la que una fotografía privada, ya sea de índole sexual o no, se difunde por internet sin el permiso del protagonista de la misma. Es aquí donde entra en juego el derecho al olvido, ya que la difusión de datos o imágenes personales puede vulnerar tres de los derechos fundamentales reconocidos en la Constitución: el derecho al honor, el derecho a la propia imagen, y el derecho a la intimidad personal y familiar.

Sin embargo, en sitios web como las redes sociales, públicas por definición, cualquiera puede tener acceso a tus fotografías.  Y si bien el Código Penal castiga a todo aquel que difunde, revela o cede a terceros imágenes que afecten a la intimidad e integridad de quien las envía, es muy importante ser prudente a la hora de subir cierto tipo de contenido a internet. No obstante, si se ha llegado a ese punto, también hay alternativas.

Las huellas digitales que puedes hacer desaparecer de internet

Tu imagen es un dato personal, por lo que si esta se ve difundida sin tu consentimiento, puedes recurrir al derecho de supresión, reconocido en la ley de protección de datos personales, que puedes ejercer solicitando uno por uno la supresión de dicha imagen de cada cuenta o sitio web en el que se haya publicado, o, en última instancia, acudiendo a la Agencia Española de Protección de Datos, que actuará de inmediato si tus peticiones previas son denegadas.

No obstante, las imágenes no son el único aspecto de tu huella digital que puedes hacer desaparecer de internet. Por ejemplo, en lo relativo a tu nombre, puedes pedir que tu nombre sea eliminado del BOE ejerciendo el ‘derecho al olvido’, a través de un formulario habilitado por los buscadores de internet, que hará que, una vez que tu petición haya sido aceptada o indexada, los datos y noticias vinculados a tu nombre desaparezcan de la red, eso sí, siempre y cuando alegues un motivo, como que ofrezca una información inexacta o desactualizada.