Los paneles solares impresos «revolucionarán la industria energética»
"Cualquiera podrá comprar una lámina de medio metro, pegarla en una ventana y obtener electricidad limpia," dice la investigadora Olga Malinkiewicz
La perovskita es un mineral relativamente raro, pero sus compuestos son baratos de producir y una de sus aplicaciones es la fabricación de células solares más sencillos y baratos de producir.
Aunque la perovskita se conoce desde mediados del siglo XIX su aplicación en la fabricación de paneles solares es muy reciente: la descubrió el investigador japonés Tsutomu Miyasaka en 2009.
Desde entonces su eficiencia (su capacidad para producir electricidad en relación a la energía solar que recibe) se ha incrementado hasta igualar la de los paneles solares convencionales de silicio (20%), más complejos y costosos, y supera con mucho el de otros paneles solares flexibles (menos de un 8%).
Paneles solares flexibles ligeros y baratos
El logro de la investigadora Olga Malinkiewicz está en que ha sido capaz de fabricar paneles solares de perovskita a baja temperatura, algo que los expertos consideran capaz de «revolucionar la industria energética», según la publicación MIT Technology Review.
Malinkiewicz comenzó a investigar con paneles solares flexibles en 2013, cuando realizaba el doctorado en la Universidad de Valencia. Más recientemente ha desarrollado un método de impresión similar a la que utilizan las impresoras de chorro de tinta. Esto significa que el compuesto mineral puede aplicarse sobre láminas de plástico flexibles y ligeras (y no sobre vidrio) lo que simplifica y abarata su fabricación. «Tanto como para que la producción en masa sea económicamente viable.»
El precio previsto se sitúa en torno a los 50 euros por metro cuadrado, una superficie capaz de suministrar «la energía que requiere un ordenador durante un día», según France 24.
Electricidad barata y limpia desde cualquier superficie
Una de las virtudes de los paneles solares de perovskita es que son «ligeros, flexibles, eficientes, económicos» y además se pueden fabricar con diferentes tonos y niveles de transparencia.
Su flexibilidad y ligereza permite adherirlos a todo tipo de superficies, grandes o pequeñas: desde el techo de un coche hasta la tapa de un ordenador portátil. Y el hecho de que sean semitransparentes significa que son aplicables a fachadas de cristal y ventanas, y producir electricidad.
«Malinkiewicz quiere que cualquiera pueda comprar medio metro cuadrado de lámina de perovskita, pegarla en la ventana del salón y conectar un cable para obtener electricidad barata y limpia sin costes de instalación,» dicen en MIT Technology Review. «Al cabo de unos años, se desintegraría sin generar residuos difíciles de reciclar.»
«La perovskita han demostrado su eficiencia produciendo electricidad incluso en superficies que reciben poca luz solar, por lo que podemos colocar estos paneles solares en casi cualquier parte», dice en Malinkiewicz en declaraciones recogidas por la agencia AFP.