De Podemos al resto: así cambió Youtube la campaña electoral
En 2014, Podemos fue pionero en aupar sus mensajes de campaña desde Youtube. De cara al 28-A, todas las demás formaciones han hecho acuse de recibo
En marzo de 2015, casi 15.000 personas llenaron el velódromo de Dos Hermanas con motivo del mitin de cierre de campaña de Podemos para las elecciones andaluzas. Una cifra similar de espectadores seguía la transmisión del acto; no por la televisión o por la radio, sino por Youtube, una plataforma entonces consolidada que ahora domina internet.
En España, Youtube es uno de los responsables del lento hundimiento de la TV. El portal de vídeos más popular del mundo, una filial de Google, agrega 300 horas de vídeo cada minuto. En el mundo, a inicios de 2019, la plataforma destronó a Apple –usualmente calificada como la empresa más grande del planeta– como la marca predilecta de los milenial.
La relevancia de este medio como una alternativa ante la prensa tradicional es una de las pocas apuestas de Podemos que los otros partidos políticos españoles no tienen miedo a emular. La formación de Pablo Iglesias fue pionera, y Ciudadanos también adoptó el nuevo paradigma de forma temprana, pero en los comicios de 2015 y 2016 fueron minoría en este sentido.
Youtube, ante el 28-A: la casa de todos los partidos
Avance rápido a la cinta. Han pasado poco menos de tres años desde las últimas elecciones generales y supone un reto encontrar fuerzas políticas en España que no asuman Youtube como una palanca vital en tiempos de campaña. Las cinco principales formaciones en las encuestas de cara al 28-A tienen la plataforma en el centro de la estrategia, no solo digital.
El canal de Youtube del PSOE, que cuenta con más de 17.000 suscriptores, ha subido más de 80 vídeos en el último mes. Ciudadanos, con unos 40.000 seguidores, casi duplica esta cantidad de material audiovisual. El canal oficial del PP tiene unos 90 vídeos publicados en las últimas cuatro semanas, para sus casi 15.000 suscriptores.
Podemos ha optado por una menor cantidad de vídeos esta vez, subiendo menos de 40 títulos en el mes antes de las elecciones, que llegan a sus más de 80.000 seguidores en la plataforma. Y Vox, con una cantidad similar de vídeos en las últimas semanas, arrasa en Youtube con sus casi 125.000 suscriptores; es el partido más seguido en el portal.
La campaña desde Youtube: Vox y Podemos arrasan en fidelidad
Más que la cantidad de vídeos y suscriptores, una forma de medir la fidelidad que consiguen los partidos en Youtube es ver el número total de reproducciones de sus canales y el tiempo que llevan dotando de contenido los mismos. Los primeros en unirse fueron PSOE, PP y Cs (en ese orden), pero ello no significa que hayan tenido los mejores resultados de audiencia.
PSOE, PP y Cs abrieron sus canales de Youtube en 2006, en junio, septiembre y diciembre, respectivamente. PSOE y PP consiguieron una media de 800.000 reproducciones por año (más de 10 millones de plays en unos 13 años), siendo definitvamente los que menos fidelidad despertaron en el medio. Curiosamente, son los partidos más antiguos en la lista.
Los de Albert Rivera, en ese mismo lapso, casi triplican a los protagonistas de la era del bipartidismo con sus 27 millones de reproducciones en el mismo tiempo; unas 2 millones de visualizaciones por año desde que se abrió la cuenta. Pero Vox y Podemos han visto la mayor rentabilidad en términos de «rating».
Las dos formaciones más lozanas, con posturas antagónicas entre sí, llegaron a Youtube en enero de 2014. Los de Santiago Abascal ya tienen casi 25 millones de reproducciones en total, mientras que los de Pablo Iglesias tienen más de 17 millones, para una media de 4,9 y 3,5 millones de views anuales en un lustro, respectivamente.
«El fenómeno Youtube se está viendo de manera potente en la campaña»
En una entrevista con Efe publicada este domingo, el especialista en marketing y empresas de la Universidad Internacional de La Rioja, Fernando Checa, afirmó que Youtube, con cerca de 2.000 millones de usuarios mensuales, tiene «un gran potencial para generar notoriedad de marca y desarrollo de negocio», algo que no ha pasado inadvertido para los partidos políticos.
«Se han dado cuenta que ya no necesitan estar en manos del minuto o segundo de oro que utilice el medio en sus informativos –también en prensa escrita o sus digitales– para pinchar el ‘mensaje fuerza’ del mitin», un fenómeno que «se está viendo de manera tremendamente potente en esta campaña electoral».
Muy comunes han sido las transmisiones en streaming de los mítines de los partidos que se presentan al 28-A. Y es que sus seguidores o curiosos no solo pueden verlo en directo, sino también en diferido, cuando les sea conveniente, lo que a juicio de Checa es «tremendamente potente» porque permite también viralizar contenidos en las redes sociales.
«Hace unos años hubiera sido tremendamente complejo montar un servidor de streaming y, en la actualidad, utilizar Youtube para estas emisiones en directo y que quede grabada la pieza, incluso con mayor o menor edición y a la que puedan acceder las personas interesadas, es muy sencillo», agregó. Para los medios no es todo amenaza; también puede facilitar su labor.
Los medios tienen una agenda y unos recursos limitados, y la participación activa de los partidos en Youtube facilita «enormemente su trabajo» porque la plataforma y las demás redes sociales se encargan del proceso de escucha o viralización que ayuda a los editores a determinar el interés general de una declaración o un hecho en concreto, comentó Checa.