Dos trabajadoras del Primark despedidas por comprar productos a un precio menor
La Justicia avala la decisión de Primark de despedir a una trabajadora y su supervisora en una tienda de Tarragona
En muchas empresas, que un trabajador tome algo sin pagar lo que corresponde no es algo común para justificar un despido. Sin embargo, cuando pasa, puede considerarse como algo muy grave.
Un caso reciente cuenta lo ocurrido en una tienda Primark de Tarragona, donde una trabajadora y su supervisora fueron despedidas. Ambas se compincharon para pagar menos de lo que costaban algunos productos. Al final, una de ellas salió con tres bolsas llenas de artículos que valían mucho más de lo que pagaron.
Flora era empleada de la tienda y Maribel la supervisora. La primera pagó dos montos de 21 y 37 euros, pero ninguno fue registrado como compras de empleados.
El Estatuto de los Trabajadores contempla el despido disciplinario por hurto o robo, y pese a que en esta normativa no se indique de forma explícita el despido por robo o hurto, sí que hay una cláusula que habla de ‘la transgresión de la buena fe contractual’, la cual Flora y Maribel violaron, según la sentencia recogida por Infobae.
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), el órgano que ha llevado el caso, ha dado a la razón a Primark, confirmando el despido de las dos trabajadoras.
Secuencia de los hechos
El caso se remonta a diciembre de 2022, cuando Flora acudió a una caja para personas con movilidad reducida, con una gran cantidad de artículos.
En ese momento, Maribel -quien supervisaba la caja- anuló la operación por una suma de 235 euros y conservó el recibo de la anulación, según indica la sentencia.
Posteriormente, en presencia de Flora, Maribel escaneó algunos productos mientras que otros fueron guardados en bolsas sin pasar por el escáner. Flora pagó dos sumas de 21 y 37 euros, pero no fueron registradas como compras de empleados. Por último, Flora dejó la tienda con tres bolsas de compras que excedían el valor de lo pagado.
Esta situación era sensible, ya que los registros sugieren que los supervisores no pueden realizar gestiones de cobros en caja sin recibir la autorización de un superior, además de que todos los empleados deben identificarse como tal al momento de hacer la compra.
Tras este hecho, Maribel recibió de Primark un despido disciplinario efectivo a partir del 21 de diciembre de 2022. Flora también fue despedida.
Defensa de Flora
El fallo inicial del juzgado social de Tarragona tumbó la demanda de Flora, que pedía declarar nulo o improcedente su despido, alegando que el cese implicaba una violación a su derecho a la conciliación laboral y familiar.
No obstante, se determinó que no habían indicios suficientes para considerar esta violación. Asimismo, se corroboró que la carta de despido contaba los requisitos mínimos legales y que los hechos probados, como la falta de lealtad y transgresión de la buena fe contractual, eran motivos suficientes para que la empresa optara por el despido.
En su apelación, Flora insistió en que la sentencia no era válida porque no se evaluaron bien las pruebas. El tribunal revisó el caso y determinó que el juzgado había analizado todo de manera correcta y sin basarse en suposiciones. También se aseguró de que Flora tuvo la oportunidad de defenderse y presentar sus argumentos, por lo que no se encontró ninguna violación a su derecho de defensa.
Flora intentó cambiar los hechos establecidos en la sentencia, argumentando que no se había demostrado que ella pagara los artículos ni que supiera de alguna irregularidad por parte de Maribel. Sin embargo, el tribunal replicó que los eventos estaban bien respaldados con pruebas claras, como documentos, testimonios y grabaciones.
Despido procedente
Por último, el tribunal ratificó que la decisión del grupo de despedir a Flora y Maribel era justificado, respondiendo a la gravedad de la conducta, en la que se atenta contra la buena fe contractual y se violan las normativas internas de Primark.
El Tribunal concluye que estas acciones son un incumplimiento contractual severo que prueba el despido disciplinario.