¿Sigue siendo obligatoria la pegatina de la ITV? La multa que hay detrás de la respuesta

La etiqueta de la ITV certifica si un vehículo ha pasado la inspección y si es apto para la circulación

Instalaciones de la ITV.

Instalaciones de la ITV La Oca en el polígono Ventorro del Cano en Alcorcón. Foto: Ricardo Rubio / Europa Press

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En los últimos meses, ha circulado el rumor en distintas informaciones sobre una supuesta eliminación de la pegatina de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) por parte de la Dirección General de Tráfico (DGT). Algunos medios apuntaban que la administración introduciría, a partir de este 2024, un sistema electrónico para consultar si la ITV está o no en vigor, por lo que ya no sería obligatoria la pegatina que se coloca en el parabrisas de los coches.

Sin embargo, se trata de una información falsa. La actual etiqueta debe seguir llevándose ubicada en el vehículo, en concreto, en el ángulo superior derecho del parabrisas por su cara interior.

La DGT no ha hecho ninguna comunicación sobre este supuesto cambio y, desde la Asociación de Estaciones de la Inspección Técnica de Vehículo (AECA-ITV), han señalado a la publicación Autofácil que la noticia es «falsa» y que «no hay nada previsto al respecto».

En concreto, desde la patronal de estaciones de la ITV, explican que si se optara por retirar la pegatina, no lo podría decidir unánimemente la DGT, pues esta regulación está contenida en el Reglamento General de Vehículos, aprobada según el Real Decreto 2822/1998.

Por tanto, afirman, «para su modificación, es preciso que se haga a través de una norma del mismo rango legal, es decir, un Real Decreto, o rango superior».

La pegatina de la ITV

La ITV es la evaluación periódica a la que se someten los vehículos para garantizar que se encuentran en las condiciones adecuadas para su circulación por la vía pública. La inspección verifica el estado mecánico eléctrico de los coches, aspectos relacionados con la emisión de gases contaminantes o los sistemas de seguridad para la protección de los ocupantes y del resto de usuarios de la carretera, entre otros.

En caso de que durante el examen se detecte que hay alguna anomalía en el vehículo, el titular deberá acudir a un mecánico para repararlo. Si son defectos leves, hay que solucionarlos, pero la ITV será favorable, es decir, que el vehículo puede circular con normalidad; si son graves, el resultado será desfavorable, es decir, que el coche solo puede moverse para llevarlo al taller a reparar los defectos; si la ITV es negativa, porque se ha detectado un problema muy grave, hay que llevarlo al mecánico con grúa, porque tiene prohibido circular.

Interior de la ITV.
Interior de la ITV de la carretera de Villaverde a Vallecas, en el Centro de Transportes. Foto: Jesús Hellín / Europa Press

La ITV se realiza cuatro años después de la fecha de matriculación en el caso de los turismos, y a partir de entonces, cada dos –igual que las motocicletas y cuatriciclos–; cuando tienen más de diez años, se debe pasar anualmente. Los autobuses realizan la inspección a los cinco años, y después semestralmente; y los ciclomotores, tres años después de matricularlos, y cada dos años a partir de entonces.

Al finalizar la evaluación, si el coche cumple con las normativas vigentes, se entrega al conductor una pegatina de color que acredita que el vehículo es apto para la circulación. La colocación del distintivo debe ser realizada por las estaciones de la ITV acreditadas.

También hay que tener en cuenta que el color de la etiqueta cambia cada año, con el objetivo de facilitar a los agentes de tráfico la identificación, con un rápido vistazo, de si el vehículo tiene la inspección caducada.

Multas por no llevar la etiqueta

Si no se lleva la pegatina de la ITV puesta, la multa es de hasta 100 euros. Esta sanción recae sobre el titular del vehículo, independientemente del conductor que lo lleve en el momento de la infracción.

Por otro lado, tampoco se deben acumular varias etiquetas de la ITV en el parabrisas. La normativa especifica que solo se debe mostrar la pegatina correspondiente a la inspección más reciente. La acumulación de etiquetas puede complicar la visibilidad del conductor en la carretera y dificultar la identificación de la caducidad de la inspección por parte de las autoridades.

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Aroa Tort López

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