Estas monedas de 100 pesetas pueden valer una fortuna

A lo largo de la historia, las monedas han sido mucho más que simples medios de intercambio, convirtiéndose en muchos casos en auténticas joyas de colección.

El estudio de la numismática revela que algunas monedas, incluso de épocas recientes, pueden adquirir un valor extraordinario con el paso del tiempo.

Algunos factores como errores de acuñación, edición limitada o cambios en el diseño pueden hacer que ejemplares aparentemente comunes se transformen en piezas de gran demanda y valor en el mercado de coleccionistas y expertos.

Ya sea guardada en un cajón olvidado o recibida como cambio, ciertas unidades pueden tener un valor mucho mayor al que muestran a simple vista, como las pesetas, que en su día fueron el día a día en España, pero que ya llevan más de veinte años fuera de circulación.

Esta antigua divisa española, que permaneció por más de 130 años en el mercado, era aceptada por el Banco de España hasta agosto de 2021, fecha límite para que los ciudadanos puedan cambiar sus pesetas por euros.

Las monedas de 100 pesetas

La pieza de 100 pesetas de 1870 es considerada una de las más valiosas por los coleccionistas, debido a que fue fabricada durante una época particular en España: tenía un gobierno provisional tras la caída de Isabel II después de la Revolución Gloriosa.

En cuanto a sus características, mide 36 milímetros de diámetro de 32,25 gramos de oro, y en su anverso se aprecia una efigie que simboliza la soberanía nacional. En su reverso, se muestra el escudo oficial monárquico de la época.

Esta pieza, en la última subasta, llegó a alcanzar un valor de 150.000 euros, aunque en otros portales puedes encontrarla por 80.000 euros como el a web Cayón Numismática.

Otra moneda de alto valor es la de 100 pesetas de 1897, en cuyo anverso se lee «Alfonso XIII por la Gracia de Dios 1897» y, en el reverso, la leyenda «Rey Constl. de España 100 pesetas».

Esta pieza, de 36 milímetros de diámetro y 32,25 gramos de oro de ley de 900 milésimas, es de edición limitada con tan solo 810 ejemplares. El precio de este metal de 1897 ronda los 3.000 euros en las subastas.

Otras 100 pesetas con menos valor, es la moneda de Franco de 1966. Fabricada en plata, se emitió entre 1966 y 1970, aunque la de mayor valor es la que muestra en la estrella el año 1969.

La razón es que en este último año se produjeron menos ejemplares: solo 4.500 monedas de un total de 56 millones. Aun así, y según de su estado de conservación, pueden llegar a valer hasta 400 euros. Para las demás monedas, su valor dependerá del precio de la plata.

Una cifra parecida se puede obtener por la moneda de 100 pesetas de 1980, que lleva la imagen del Rey Juan Carlos; mientras que las de 100 pesetas de 1992 rondan los 100 euros.