Esta moneda de las antiguas pesetas se vende por más de 1.000 euros
Descubre por qué los coleccionistas valoran tanto esta moneda de la antigua divisa española
Las antiguas pesetas, que dejaron de circular en 2002 con la introducción del euro a España, se han convertido en un objeto de interés para coleccionistas y nostálgicos.
Aunque hasta 2021 era posible canjearlas en el Banco de España, en la actualidad muchas de ellas han adquirido un valor muy superior al nominal, especialmente aquellas consideradas raras o con características únicas.
El mercado numimástico ha revalorizado ciertas piezas que, debido a tiradas limitadas, errores de acuñación, ediciones especiales u otros motivos, son altamente demandadas.
Estas monedas no solo evocan un pasado reciente, sino que ahora pueden alcanzar cifras sorprendentes en subastas y plataformas especializadas, despertando el interés de expertos y curiosos.
Entre las más buscadas, se encuentra una en particular que ha llegado a venderse por más de 1.000 euros. Su exclusividad y características únicas la convierten en un tesoro deseado. Estamos hablando de la moneda de 25 pesetas de 1994.
25 pesetas de 1994
Esta pieza de 25 pesetas de las Islas Canarias fue acuñada en bronce de aluminio en 1994 por la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre (FNMT) durante el reinado de Juan Carlos I.
Con un peso de 4,2 g, esta moneda tiene un diámetro de 19,5 milímetros y un grosor de 1,6 milímetros, aunque su característica más notoria es el agujero del medio, algo común entre las piezas de 25 pesetas.
En este caso, su anverso muestra el drago canario, un árbol conocido y símbolo de la vegetación de Canarias, acompañado de la leyenda ‘España’ en mayúsculas.
En el reverso, hay un dibujo que rinde homenaje al artista lanzaroteño César Manrique Mar en la orilla del Martiánez. Las leyendas que van en el reverso son ’25 ptas’, ‘Canarias’ y M, símbolo del FNMT.
El grabador de esta pieza es Garcilaso Rollán Sánchez y su canto (borde) es totalmente liso o llano, según explica el portal Numista.
Sobre su tasación, puedes encontrar esta pieza en portales web, como eBay, Etsy o Milanuncios por hasta 1.500 euros. Recuerda que su valor dependerá principalmente de su estado de conservación y si presenta una característica única (como error de acuñación).
¿Por qué las 25 pesetas tenían un agujero?
Las 25 pesetas son una de las piezas más recordadas por los españoles, ya que algunas de estas tenían un agujero en el medio.
Estas monedas se fabricaron durante el cambio en el sistema monetario español en 1990, una época en la que convivían en circulación metálico muy distinto de la etapa de Franco y el rey Juan Carlos I.
Según explicó el experto Alfonso Morales Muñoz a El Confidencial, que en 1990 se decidió diseñar un ‘cono monetario’, donde la moneda de menor valor tendría el diámetro más pequeño, y la de mayor valor, el más grande.
Al planificar este nuevo sistema, se definieron las características técnicas de cada pieza. En el caso de las 25 pesetas, se optó por incluir un agujero central como homenaje a la moneda de 25 céntimos de 1927, la primera moneda española con esta característica.
Las monedas perforadas no son exclusivas de España: a lo largo de la historia piezas parecidas han sido acuñadas en diversos lugares, como la Dinastía Qing en China, la Alemania Nazi, Japón, Fiji, Grecia y Dinamarca durante el siglo XX, entre otros.
Este diseño, que se remonta a siglos atrás, no solo buscaba complicar la falsificación, sino que en sus primeras versiones parece haber sido pensado para facilitar su transporte, ya que podían ensartarse en una cuerda para no perderlas.