La otra cara del documental de Jenni Hermoso y la selección femenina: «mucha gente no sabe la historia real»

El nombre Jenni Hermoso vuelve a ser tendencia en redes sociales tras el estreno del tráiler de »#SeAcabó: Diario de las Campeonas’, una producción de Netflix que recoge la situación de las futbolistas españolas en torno al Mundial femenino de 2023.

El documental aborda la incertidumbre que vivían las jugadoras antes del encuentro, así como la forma en que el título mundial se vio opacado por el efusivo beso que Luis Rubiales, entonces presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), le dio a Hermoso durante la celebración.

Algunas de las deportistas que participan en este proyecto son Jenni Hermoso, Alexia, Irene Paredes, Aitana Bonmatí y Laia Codina, quienes narran en primera persona todo lo que sintieron y afrontaron esos meses.

«Mucha gente tampoco sabe la historia real de lo que pasó», comienza diciendo Hermoso en el avance del documental. Recordemos que el lamentable episodio con Rubiales no solo la convirtió en una figura del feminismo, sino que ocasionó una gran purga en la RFEF con la salida de este y del entrenador principal Jorge Vilda.

La historia también abarca el polémico caso que vivió la selección femenina previo al Mundial, cuando 15 jugadoras renunciaron al equipo para salvaguardar su «salud emocional».

En el tráiler, Laia Codina hace una sorpresiva declaración sobre el tema. «Para mí era un grupo roto. Parecía que teníamos que ganar para joder a las otras», revela Codina en referencia a las ’15 rebeldes’.

¿Qué pasó con las 15 rebeldes?

Un año antes de conseguir el título mundial (en septiembre 2022), 15 jugadoras de la selección española femenina de fútbol renunciaban al equipo mientras no cambiara la situación que se había establecido en la última concentración con el seleccionador Jorge Vilda.

La postura de RFEF se mostró sólida y aseguró que no admitiría «ningún tipo de presión por parte de ninguna jugadora a la hora de adoptar medidas de ámbito deportivo».

Al no ceder, las deportistas remitieron correos electrónicos con «la misma redacción» señalando que la concentración afectaba su «estado emocional» y que renunciaban en tanto la situación «no se revierta», comunicó en este tiempo la RFEF.

Previamente, un sector de las internacionales ya había solicitado la dimisión de Vilda, algo que fue desmentido por las capitanas Jenni Hermoso, Irene Paredes y Patricia Guijarro, aunque sí admitieron que habría que cambiar «ciertos aspectos internos».

Pero las diferencias con el técnico iban más allá del campo. Fuentes cercanas a las jugadoras revelaron a Mundo Deportivo que uno de los principales motivos para sacar al técnico eran su exceso de control, que llegaba a ser incluso «dictatorial».

Esto fue confirmado por Hermoso en el programa ‘Plantea Calleja‘, donde contó que Vilda las obligaba a dejar abiertas las puertas de sus habitaciones hasta las doce de la noche para que él mismo pudiera comprobar que estaban allí antes de dormir, algo que consideraban en contra de su intimidad.

Un paso atrás

Tiempo después y con el Mundial cada vez más cerca, algunas de las jugadoras amotinadas dieron marcha atrás. En junio de 2023, ocho de estas «rebeldes» remitieron un nuevo mensaje a la Federación declarándose nuevamente disponibles si el seleccionador lo consideraba oportuno. Según fuentes internas, estos correos no incluían ningún tipo de disculpa.

Este retroceso fue duramente criticado en redes sociales, y la Federación apenas cedió en su postura. Vilda sólo eligió a tres: Ona Batlle, Mariona Caldentey y Aitana Bonmatí.