La carretera más multada en España: casi 150.000 sanciones en un año

La carretera gaditana A-381, en el punto de mira de los conductores por sus altas cifras de sanciones

Los dos radares que más multas emiten en España están ubicados en una carretera de Cádiz. Foto: Eduardo Parra / Europa Press

Los dos radares que más multas emiten en España están ubicados en una carretera de Cádiz. Foto: Eduardo Parra / Europa Press

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

Cada año, la Dirección General de Tráfico (DGT) recauda millones de euros en sanciones, y, aunque su principal objetivo es aumentar la seguridad en las carreteras, los conductores ven sus bolsillos cada vez más afectados. Los radares, ya sean fijos, móviles o de tramo, son una herramienta clave para controlar el exceso de velocidad en todo el territorio español.

Si hay una carretera en España que cualquier conductor debería evitar, es la A-381, especialmente si no quiere que su trayecto termine con una multa. Esta carretera en la provincia de Cádiz ha sido catalogada como la más sancionada del país, acumulando casi 150.000 multas en un solo año. Un número impactante que refleja no solo la eficacia de los radares, sino también la importancia de respetar los límites de velocidad para garantizar la seguridad vial.

Los conductores que transitan por la A-381 deben estar más atentos que nunca. Foto: Carlos Luján / Europa Press
Los conductores que transitan por la A-381 deben estar más atentos que nunca. Foto: Carlos Luján / Europa Press

Cádiz: el epicentro de las multas en carretera

Según el estudio de Automovilistas Europeos Asociados (AEA), la comunidad autónoma de Andalucía se lleva la palma en cuanto a multas por exceso de velocidad, y dentro de esta, Cádiz es la provincia estrella. Aquí se encuentran los dos radares más activos de España, ambos ubicados en la misma carretera, la A-381, que conecta Jerez de la Frontera con Los Barrios.

El primero de estos radares, situado en el kilómetro 74,7, ha sido el que más denuncias ha registrado en todo el país: nada menos que 79.258 en un año. Está ubicado justo a la salida del túnel de Valdeinfierno, lo que lo convierte en una trampa casi inevitable para los conductores que no reducen la velocidad a tiempo.

Un poco más adelante, en el kilómetro 37,29 de la misma carretera, se encuentra otro radar que, si bien no alcanza las cifras del anterior, tampoco se queda atrás. Este dispositivo ha acumulado 68.321 multas, convirtiéndose en el segundo más eficiente de España. En total, ambos radares han generado 147.579 sanciones, lo que los convierte en los campeones indiscutibles de la recaudación por infracciones de velocidad.

El papel de la DGT y la seguridad vial

La DGT insiste en que el objetivo principal de estos radares no es recaudar dinero, sino mejorar la seguridad en las carreteras. De hecho, los datos respaldan esta afirmación: las zonas con mayor número de sanciones suelen coincidir con puntos donde los accidentes por exceso de velocidad han sido frecuentes. Es por ello que la DGT sigue apostando por la instalación de estos dispositivos en áreas de alto riesgo, como la A-381.

Sin embargo, la pregunta que muchos conductores se hacen es: ¿están los radares realmente reduciendo los accidentes o simplemente convirtiéndose en una fuente de ingresos para el Estado? Lo cierto es que, aunque las multas puedan parecer excesivas, su presencia actúa como un recordatorio constante de la necesidad de respetar las normas de tráfico.

Las comunidades más sancionadas

Aunque Andalucía encabeza el ranking de multas por exceso de velocidad, otras comunidades autónomas no se quedan atrás. La Comunidad Valenciana y Castilla y León son también territorios con una alta recaudación por infracciones de tráfico. En estas regiones, los conductores deben estar especialmente atentos, ya que los radares se han vuelto una constante en las principales vías de comunicación.

En particular, Valencia ocupa el segundo puesto en cuanto a recaudación por multas, solo superada por Cádiz. Los datos reflejan que, aunque no hay un complot para atrapar a los conductores de estas comunidades, ciertas zonas se han convertido en puntos críticos de control de velocidad.

Multas más allá de la velocidad

Sin embargo, no todo se reduce a sanciones por exceso de velocidad. En los últimos años, la DGT ha puesto su atención en otras infracciones que comprometen la seguridad vial. Un ejemplo claro son las rotondas, una zona donde muchos conductores cometen errores graves. Según la DGT, uno de cada tres conductores implicados en accidentes en glorietas había cometido alguna infracción.

Las penalizaciones en glorietas pueden ser por no respetar la prioridad, circular a una velocidad excesiva o no mantener la distancia de seguridad. Foto: DGT
Las penalizaciones en glorietas pueden ser por no respetar la prioridad, circular a una velocidad excesiva o no mantener la distancia de seguridad. Foto: DGT

Las sanciones por no respetar las normas en las rotondas pueden ser severas. La más común, entrar sin respetar la prioridad, conlleva una multa de 200 euros y la pérdida de cuatro puntos del carné. Pero las consecuencias pueden ser aún más graves si se abandona la rotonda desde el carril interior sin ceder el paso a otros vehículos, una maniobra que puede llevar incluso a sanciones penales.

Con casi 150.000 sanciones en un solo año, la A-381 en Cádiz ha ganado el dudoso honor de ser la carretera más multada de España. Los radares de esta carretera se han convertido en un símbolo de la lucha de la DGT por reducir los accidentes de tráfico, pero también en una advertencia para todos los conductores: respetar los límites de velocidad no solo evita multas, sino que salva vidas.

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

Deja una respuesta