Un miembro de los CDR boicotea un acto de Borrell en Bruselas
Adrià Carrasco, uno de los huidos a Bélgica, increpa al ministro durante una conferencia: "La Constitución es una puta farsa y una mentira"
Un miembro de los Comités de Defensa de la República (CDR) Adrià Carrasco boicoteó este miércoles el discurso que el ministro de Exteriores, Josep Borrell, pronunció en Bruselas sobre el aniversario de la Constitución española.
Carrasco gritó «La Constitución es una puta farsa y una mentira». En ese momento Borrell se refería a la aplicación del artículo 155 en Cataluña después del referéndum de independencia del 1-O. El activista de los CDR fue desalojado por los servicios de seguridad.
Carrasco huyó a Bruselas en abril pasado antes de que la Guardia Civil intentase detenerlo en su domicilio. La Audiencia Nacional lo investigó por supuestos delitos de terrorismo y rebelión. Posteriormente, este tribunal rebajó las acusaciones a simples desordenes públicos y se inhibió del caso a favor de los juzgados ordinarios catalanes. Sin embargo, el activista se quedó en Bruselas.
En el país de Puigdemont
Borrell pronunció el discurso de apertura de un acto de la organización Sociedad Civil Catalana (SCC) con motivo de los 40 años de la Constitución. Este acto se realizó en Bélgica, donde también se ha instalado Carles Puigdemont.
La vicepresidenta de SCC, Miriam Tey, se encargó de presentar a Borrell. Este afirmó en su intervención que los últimos 40 años han sido los mejores de la historia de España desde la batalla de Trafalgar.
En el acto también participaron la exministra socialista Ángeles González-Sinde, la diseñadora de moda Agatha Ruiz de la Prada, la periodista víctima de ETA Irene Villa y el historiador José Varela.
En una segunda mesa de debate intervinieron el líder del PP en el parlamento europeo, Esteban González Pons; la eurodiputada socialista Inés Ayala; y el portavoz de Ciudadanos en el Congreso, Juan Carlos Girauta.
Borrell viajó a Bélgica después de mantener diversas polémicas con políticos locales por su posicionamiento a favor de los políticos presos catalanes. Incluso retiró el estatus diplomático al delegado del gobierno de Flandes en España.
