Torra amplía las horas y días de Junqueras fuera de la cárcel

La Generalitat ampliará los permisos de Oriol Junqueras, Carme Forcadell y Raül Romeva para que salgan de prisión los días festivos para trabajar o hacer voluntaro amparándose en el artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario. La decisión se justifica para que los reos puedan recuperar las horas perdidas por el confinamiento del coronavirus. 

Junqueras y Romeva, que hasta ahora tenían permitido salir seis horas al día durante tres días a la semana, tendrán autorización de la cárcel de Lledoners para salir del centro penitenciario durante cuatro días hasta un máximo de 10 y 12 horas para ir a trabajar, según ha informado la consellería de Justicia que preside la republicana Ester Capella. 

Forcadell también saldrá beneficiada de esta medida. La presidenta del Parlament tenía autorizado salir tres días a la semana durante nueve horas a la cárcel de Mas d’Enric y permite hacerlo ahora durante doce horas, en su caso por una modificación horaria planteada por la asociación donde lleva a cabo labores de voluntariado. Mientras duren las restricciones por el estado de alarma, Junqueras y Romeva podrán reanudar su actividad laboral solo si sus centros de trabajo permanecen abiertos.

Vuelta a la semilibertad

La Generalitat volvió a poner en libertad a algunos políticos independentistas condenados por sedición tras las dos semanas de cierre total de la economía. El único requisito que requieren es que puedan demostrar que la empresa o entidad a la que prestan servicios ha recuperado la actividad, puesto que deja fuera a aquellos presos a los que se les autorizó salir por el 100.2 para cuidar a familiares o llevar a cabo trabajos de voluntariado. 

Los políticos presos se acogieron al artículo 100.2 del reglamento poco después de que Jordi Sánchez y Jordi Cuixart cumplieran un cuarto de la pena en prisión. Todos los que solicitaron esta medida excepcional en el segundo grado penitenciario fueron aptos, según las Juntas de Tratamiento. La Fiscalía ya ha recurrido a los Juzgados de Vigilancia Penitenciaria estos permisos, puesto que en ningún momento han mostrado arrepentimiento. 

La concesión de estos permisos ha generado mucha polémica, puesto que Cataluña es la única comunidad autónoma con la competencia de prisiones transferida desde 1984. Por eso, Serveis Penitenciaris en Cataluña depende de la conselleria de Justicia de la Generalitat, a diferencia del resto de España, donde Instituciones Penitenciarias cuelga del Ministerio del Interior.