Torra alquila el Teatre Nacional de Catalunya para un acto de masas
El presidente de la Generalitat acude a un gran escenario para inaugurar el "otoño caliente" del soberanismo y poner rumbo de ruptura
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, quiere iniciar el curso político por todo lo alto. El próximo martes, 4 de septiembre, tiene previsto protagonizar una conferencia («Nuestro momento») en la sala grande del Teatre Nacional de Catalunya (TNC), cuyo alquiler asciende a 7.800 euros, según ha podido comprobar Economía Digital.
El TNC es un escenario simbólico para el movimiento soberanista, puesto que ya acudió a este mismo espacio el año pasado, en julio de 2017, para lanzar la campaña del referéndum. El Govern y el grupo parlamentario de Junts pel Sí optaron por esta imponente sala para presentar la ley catalana con la que querían amparar el referéndum del 1 de octubre.
Poco después de aquel mitin, el juzgado de instrucción número 13 de Barcelona reclamó información sobre los gastos del mencionado acto en el marco de la investigación sobre los preparativos del 1 de octubre. El grupo de Junts per Sí aseguró en aquel momento que había desembolsado un total de 17.690 euros por el alquiler de la sala, así como por los gastos de montaje y por la organización del evento.
La conferencia de Torra será retransmitida en directo por 3/24, el canal 24 horas de información de Televisió de Catalunya. Así lo ha anunciado el propio departamento de comunicación de la Generalitat, antes incluso que el propio canal informativo.
Torra prepara el terreno antes de los juicios
El presidente de la Generalitat, Quim Torra y Puigdemont han pactado el contenido de su alocución, pensada para anunciar el rumbo rupturista del gobierno catalán. Torra hará pública su intención de no acatar la presumible sentencia condenatoria del Tribunal Supremo y volverá a urgir al Gobierno de Pedro Sánchez a acceder a la celebración de un referéndum de autodeterminación si no quiere enfrentarse a un nuevo intento de secesión.
El contenido de la conferencia amenaza con poner en peligro el diálogo con el Gobierno en un contexto cada vez más complicado para Sánchez. El presidente del Gobierno mantiene la necesidad de apoyos del Pdecat y de ERC en el Congreso, pero se arriesga a aparecer ante la opinión pública como un rehén de los soberanistas. Todo ello ante la creciente vigilancia de PP y Ciudadanos.
Ajenos a todo ello, los soberanistas están centrados en llevar a cabo una de sus demostraciones de fuerza en la sala grande del TNC, con capacidad para unas 850 personas. El acto servirá para lanzar el nuevo curso político y para comprobar la envergadura del desafío que planea el vicario de Puigdemont.
El otoño caliente se avanza. Ya está aquí.