La patronal metalúrgica catalana se suma a los rechazos a la reducción de jornada laboral
La patronal metalúrgica califica la medida de "imposición legal" que ignora el diálogo social y aumentará los costes sociales en el sector
Jaume Roura en la asamblea de UPM / UPM
La Unió Patronal Metal·lúrgica (UPM) catalana ha rechazado la propuesta de reducción de la jornada laboral, calificándola de «imposición legal» que no respeta el diálogo social y que, según ellos, incrementará los costes sociales, una de las medidas acordadas entre PSOE y Sumar para despejar la investidura de Pedro Sánchez.
En un comunicado emitido el miércoles, la UPM criticó la medida, afirmando que se tomó «fuera del pacto social» y «obviando preceptos de nuestra Carta Magna».
La patronal, que forma parte de Foment del Treball, argumenta que cualquier propuesta de modificación en el ámbito laboral debe ser discutida y acordada entre los agentes sociales, teniendo en cuenta las particularidades del sector y las empresas que lo componen.
La UPM expresó sus preocupaciones sobre la posibilidad de mantener el volumen de trabajo con una jornada reducida y subrayó que «está claro que comportará un aumento de los costes sociales», ya que se espera que esta medida se aplique sin afectar los salarios de los trabajadores.