La patronal metalúrgica catalana se suma a los rechazos a la reducción de jornada laboral
La patronal metalúrgica califica la medida de "imposición legal" que ignora el diálogo social y aumentará los costes sociales en el sector
La Unió Patronal Metal·lúrgica (UPM) catalana ha rechazado la propuesta de reducción de la jornada laboral, calificándola de «imposición legal» que no respeta el diálogo social y que, según ellos, incrementará los costes sociales, una de las medidas acordadas entre PSOE y Sumar para despejar la investidura de Pedro Sánchez.
En un comunicado emitido el miércoles, la UPM criticó la medida, afirmando que se tomó «fuera del pacto social» y «obviando preceptos de nuestra Carta Magna».
La patronal, que forma parte de Foment del Treball, argumenta que cualquier propuesta de modificación en el ámbito laboral debe ser discutida y acordada entre los agentes sociales, teniendo en cuenta las particularidades del sector y las empresas que lo componen.
La UPM expresó sus preocupaciones sobre la posibilidad de mantener el volumen de trabajo con una jornada reducida y subrayó que «está claro que comportará un aumento de los costes sociales», ya que se espera que esta medida se aplique sin afectar los salarios de los trabajadores.