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Sánchez pide a los empresarios catalanes que sigan «tirando del carro»
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, interpreta que los resultados del 12M evidencian que los catalanes han elegido el “diálogo” ante el “empecinamiento”
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha pedido a los empresarios catalanes durante su discurso para clausurar la última jornada de la Reunió del Cercle d’Economia en el Palau de Congressos de Catalunya en Barcelona que «sigan tirando del carro», como han hecho «durante estos últimos años».
«Cataluña quiere el reencuentro no el enfrentamiento, opta por el diálogo no por el empecinamiento», ha asegurado en alusión a los resultados cosechados en las elecciones del pasado 12 de mayo. En este sentido, se ha mostrado convencido que la comunidad autónoma ha elegido el camino del perdón dejando atrás cualquier otra fórmula.
«Ha lanzado un mensaje claro, quiere una nueva etapa de buena gestión y de acuerdos», ha incidido antes de considerar que la persona idónea para liderar esta nueva etapa es el primer secretario del PSC y cabeza de cartel en los comicios autonómicos, Salvador Illa. «Todos los caminos pasan y acaban en él», ha añadido.
En este contexto, se ha mostrado convencido que la comunidad autónoma abrirá un nuevo capítulo marcado por la «prosperidad», que le permitirá «superar el estancamiento político». Así, ha subrayado que esta nueva etapa requerirá del compromiso de la sociedad, pero especialmente, del tejido productivo.
También ha trasladado el compromiso del Gobierno para que Cataluña cuente con una «mejor y mayor financiación», así como a respetar la historia, cultura y lengua catalanas y redoblar los esfuerzos del Ejecutivo en materia de infraestructuras.
A la vez, ha prometido mantener los compromisos contraídos con el Govern en la última legislatura catalana como la condonación de la deuda pública o los traspasos de competencias para desarrollar y consolidar el autogobierno.
Sánchez lamenta la polarización en la política
El líder del Ejecutivo ha aprovechado su intervención para lanzar un recado al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo. Tras asegurar que los populares son «rehenes del dogmatismo que se han impuesto», les ha recriminado que su estrategia política se base en la destrucción y deshumanización del adversario político.
En este punto, le ha afeado que le convierta en el «enemigo público número uno» porque dificulta alcanzar acuerdos, como el desbloqueo del Consejo General del Poder Judicial (CGOJ), entre otros. «La polarización es evidente», ha lamentado antes de añadir: «Unos insultan y otros somos insultados».
Con la vista puesta en las elecciones europeas, se ha referido a las declaraciones que el líder de la oposición pronunció durante su discurso en la jornada anterior del Cercle d’Economia, cuando abrió la puerta a pactar con la extrema derecha europea.
A pesar de que reconoció que el Partido Popular Europeo no se plantea pactos tras los comicios a la Eurocámara con formaciones de extrema derecha, puntualizó que la formación de la primera ministra italiana, Georgia Meloni no es homologable a otros de ese ámbito político.
«En la ecuación puedo asegurar que no me voy a sentar con Vox«, ha subrayado Sánchez, quien ha calificado las declaraciones del presidente del PP de «graves». «No estamos hablando de un Gobierno, sino de un grupo parlamentario marcademente ultraderechista», ha señalado y ha puesto como ejemplo «es muy difícil marcar una agenda de transición ecológica con quien niega la evidencia científica sobre la emergencia climática».
Con todo, ha confiado que en las elecciones europeas «impere la sensatez» y no se rompan «consensos históricos» que han permitido traer los «mejores años de progreso y libertades».