Puigdemont responde a Sanchez: «Junts no ha renunciado ni renunciará a la unilateralidad»
El expresidente de Catalunya, Carles Puigdemont, asegura que España se encuentra en un dilema: repetir elecciones o pactar con Junts
El expresidente de Catalunya, Carles Puigdemont, ha dejado bien claro que Junts «no ha renunciado ni renunciará a la unilateralidad». Pues, a su juicio, se trata de un recurso «legítimo» para hacer valer los derechos de su formación política, según ha desgranado en una publicación en su cuenta de Instagram.
«Hoy España tiene un dilema de resolución compleja», ha subrayado para luego contraponer: «O repite elecciones, con el riesgo de que los equilibrios políticos sean tan frágiles como ahora, o pacta con un partido que mantiene la legitimidad del 1 de octubre».
De esta manera, ha recordado su intervención en la conferencia que tuvo lugar el pasado septiembre en Bruselas, en las que estableció sus condiciones de negociación tanto con los socialistas, como la plataforma Sumar, encabezada por Yolanda Díaz.
Negociaciones con el PSOE
Las declaraciones de Puigdemont llegan después de que la portavoz de los posconvergentes en el Congreso de los Diputados, Mirían Nogueras, se reuniese durante casi hora y media con el candidato socialista a presidir el Gobierno, Pedro Sánchez.
Entonces, la diputada ya alejó la posibilidad de apoyar la investidura del secretario general del PSOE si sus intenciones con Cataluña se limitan a hacer y decir «lo mismo» que en la última legislatura.
De hecho, a lo largo de la reunión, Nogueras aprovechó para hacer llegar a Sánchez una transcripción de la conferencia que el expresidente catalán pronunció en Bruselas, en la que desgranó sus condiciones para respaldar la investidura de Sánchez.
«No estamos aquí ni para escuchar, ni para hacer lo que se ha hecho en los últimos cuatro años, porque todos sabemos y se ha confirmado que no ha funcionado», recalcó.
Las condiciones de Junts
Cabe recordar que algunas de las condiciones fijadas por Puigdemont pasaban por el reconocimiento de la «legitimidad» del independentismo, una amnistía a todos los encausados por el procés, incluyendo en su ámbito de aplicación la consulta soberanista del 9N de 2014 y el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017.
En ese momento, Puigdemont ya remarcó que no estaba dispuesto a renunciar a la unilateralidad. «Solo un referéndum acordado con el Estado español podría sustituir el mandato del 1-O», apuntó. El expresidente catalán también hizo alusión a la necesidad de abordar un «gran paquete de cuestiones materiales pendientes» en Cataluña, como el déficit fiscal de «20.000 millones de euros».
También se refirió al servicio de trenes, la sanidad, los salarios que se cobran en la región o la falta de competencias para atender la inmigración y el acceso a la vivienda.