Pfizer retrasa el suministro de vacunas a España por problemas logísticos
La farmacéutica sufre un contratiempo en la fábrica belga de Puurs que impide la llegada del primer gran envío de 350.000 dosis de la vacuna
España tendrá que esperar 24 horas más para poder poner en marcha toda la maquinaria para llevar a cabo una auténtica vacunación masiva de la población. La farmacéutica Pfizer ha comunicado al Ministerio de Sanidad que no podrá entregar la partida prevista para este lunes por un problema logístico en el envío de los lotes.
El domingo solo se llevó a cabo una vacunación testimonial en puntos estratégicos de las 17 comunidades autónomas pero no se disponía más que de 9.750 dosis para repartir por todo el país. El primer gran envío de unidades no se esperaba hasta el lunes, cuando ya se iban a activar los protocolos para continuar con las inyecciones de los colectivos vulnerables a gran escala.
Sin embargo, la compañía estadounidense ha informado de un “problema en el proceso de carga y envío” de las vacunas que tiene su origen en la fábrica de Puurs (Bélgica) desde la que se coordina el suministro de las dosis a buena parte del continente. Un total de ocho países europeos han sufrido retrasos como consecuencia de este motivo, según ha publicado la Agencia Efe.
El Ministerio de Sanidad ha admitido la demora pero ha asegurado que el problema ya está resuelto, por lo que en unas horas volverán a reanudarse los envíos para que el martes 29 de diciembre se produzca “la continuación de la vacunación en todo el territorio nacional”.
El plan previsto pasa porque España reciba al inicio de cada semana cerca de 350.000 dosis de la vacuna de Pfizer contra el coronavirus que posteriormente repartirá entre todas las comunidades autónomas. Un reto logístico que debe hacerse en un espacio relativamente corto de tiempo para impedir que se rompa la cadena del frío que obliga a conservar los viales a menos 80 grados centígrados de temperatura.
España aspira a conseguir 4,5 millones de dosis en el primer trimestre
Los retrasos en los envíos han despertado las alertas en un complejo plan de suministro que la farmacéutica estadounidense tiene que coordinar con los 27 estados miembro de la Unión Europea que han formado parte de la estrategia conjunta de compra de vacunas.
La previsión de España es alcanzar los 4,5 millones de unidades durante las próximas 12 semanas. Una remesa que permitiría inmunizar a cerca de 2,25 millones de personas a lo largo del primer trimestre del año, ya que son necesarias dos inyecciones para que la vacuna sea realmente efectiva.
En este grupo prioritario entran colectivos como las personas mayores de las residencias, el personal que trabaja con ellos, los dependientes o los profesionales sanitarios que trabajan en primera línea.
El reparto de la vacuna ya ha generado enfrentamientos políticos
Precisamente, la escasez de vacunas ha sido uno de los motivos que ha resucitado el enfrentamiento político entre el Gobierno de Pedro Sánchez y el de Isabel Díaz Ayuso. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha denunciado un incumplimiento en los compromisos de reparto de las dosis, que se ha saldado con menos unidades de las previstas.
Madrid ya recibió el domingo las primeras 1.200 unidades del fármaco que ha diseñado la compañía Pfizer para distribuirlas entre tres residencias de todo el territorio. Es una de las partidas más elevadas de todo el país pero sigue siendo un gesto simbólico para el volumen de personas que reside en la capital española. Se trata de una cifra similar a la de Cataluña (1.595 unidades) o a la de Andalucía (1.840 dosis), las otras dos grandes regiones en número de población.
El Ministerio de Sanidad tenía previsto entregar el lunes a la Comunidad de Madrid una partida mayor con 48.740 unidades de la vacuna para empezar a cubrir ya a un número considerable de personas de riesgo. Sin embargo, los retrasos de Pfizer han impedido que las unidades lleguen a tiempo y el Gobierno madrileño tendrá que seguir vacunando con las primeras dosis que recibió.
El Gobierno de Pedro Sánchez se ha comprometido a alcanzar al final del primer trimestre el reparto de 585.000 vacunas en la Comunidad de Madrid. Un volumen que podría servir para limar las asperezas entre las dos administraciones, que han protagonizado duras batallas políticas por la gestión de la pandemia durante la segunda oleada de casos.