Cronología de la batalla contra el coronavirus: los pasos de Pfizer para lanzar su vacuna en España
La farmacéutica estadounidense Pfizer concluye un camino de investigación en el que ha movilizado a 44.000 voluntarios y ha sorteado grandes problemas
España ha comenzado este domingo a suministrar las primeras dosis de la vacuna contra el coronavirus a los colectivos más vulnerables de la sociedad. Los ancianos de las residencias han acaparado los focos en esta primera jornada de la campaña. Detrás de este éxito, hay un camino tortuoso que tiene un nombre propio: la farmacéutica Pfizer.
El gigante estadounidense se ha convertido en el gran vencedor de la carrera internacional del antígeno, logrando obtener el primero la autorización para el uso de su prototipo en la gran mayoría de potencias occidentales. Un proceso que ha logrado en tiempo récord, reduciendo una investigación que en un contexto habitual podría haberse prolongado cinco años.
Pfizer renuncia a la financiación pública de Donald Trump
El inicio de la investigación de la vacuna de Pfizer está condicionado por los recursos de los que disponía la gran farmacéutica. La dirección de la empresa decidió renunciar al programa de financiación Warm Speed que puso en marcha Donald Trump y al que se acogieron la mayor parte de los estudios de Estados Unidos.
“Quería liberar a nuestros científicos de cualquier burocracia. Cuando recibes dinero de alguien… eso siempre viene con condiciones. No quería nada de eso. Quería mantener a Pfizer fuera de la política”, admitió meses después el director ejecutivo, Albert Bourla.
Pfizer apuesta por la tecnología ARN mensajero para su vacuna
La compañía estadounidense decidió en el primer tramo de la investigación que apostaría por la tecnología ARN mensajero para construir la estructura de su vacuna. Una decisión que ha quedado demostrada como un acierto porque también es el camino escogido por Moderna, la farmacéutica que le ha pisado los pies durante todo el proceso.
Este método permite transferir información al organismo para que genere una respuesta inmune contra una enfermedad pero no implica la liberación de un patógeno como en las vacunas tradicionales. El método puede jugar un papel fundamental en el futuro para afaptar la vacuna a nuevas mutaciones que vayan apareciendo.
22 abril: Pfizer prueba su vacuna en los primeros 200 voluntarios
La farmacéutica logró inocular las primeras dosis de la vacuna experimental ya en el mes de abril. De la mano de su socio alemán BioNtech, los desarrolladores dispusieron de una primera muestra de 200 voluntarios sanos, de entre 18 y 55 años de edad para obtener los primeros datos del impacto del antígeno en seres humanos.
Era un momento crucial de la investigación internacional en la que la Universidad de Oxford y la farmacéutica Astrazeneca se posicionaban como los candidatos número uno para lograr con éxito la vacuna.
27 de julio: Arranca la fase tres con 44.000 participantes de todo el mundo
No fue hasta después del verano cuando el tándem Pfizer-BioNtech se pusieron manos a la obra en la fase tres de la investigación. Es el momento más decisivo de todos porque la vacuna se prueba en decenas de miles de voluntarios, lo que permite tener un resultado bastante certero sobre el efecto del antígeno.
Las compañías lograron reclutar una amplia muestra de hasta 44.000 participantes de distintos puntos del mundo, todos ellos mayores de 16 años. El objetivo era reunir diferentes perfiles étnicos para asegurarse que la muestra era representativa de la población mundial.
Aparecen los primeros síntomas adversos de la vacuna
La inyección de miles de participantes permitió revelar los primeros síntomas adversos de la vacuna de Pfizer. Los voluntarios relataron algunos efectos como el dolor de cabeza, la fiebre o las molestias musculares después de haber recibido las primeras inyecciones. Todos forman parte de un fenómeno habitual de vacunación.
El prototipo logró evitar grandes complicaciones en esta fase, que sí que sufrieron otras investigaciones como la de la Universidad de Oxford que se vio obligada a frenar sus ensayos por la aparición de complicaciones neurológicas graves en algunos de los participantes de sus pruebas.
11 de noviembre: La Unión Europea adquiere 300.000 dosis de la vacuna
Los buenos datos internos que manejaba Pfizer le permitió lanzarse a la negociación internacional antes incluso de haber concluido toda la investigación. La farmacéutica cerró su primer contrato con Estados Unidos y el 11 de noviembre logró un contrato con la Unión Europea que reservó las primeras 300.000 dosis.
Este acuerdo es uno de los principales motivos que han permitido que la vacuna haya llegado este domingo hasta Guadalajara. La Comisión Europea acordó repartir las dosis de forma equitativa entre todos sus países miembro en función de la población. A España le correspondieron 20,8 millones de unidades.
18 de noviembre: Pfizer certifica una eficacia del 95% de su vacuna
Tras analizar los datos de toda la investigación con decenas de miles de participantes, los investigadores de Pfizer concluyeron que su vacuna era eficiente en un 95% de las ocasiones. Es el dato más alto de la carrera internacional, por encima del de Moderna que logró alcanzar un porcentaje del 94,5%.
Solo ocho voluntarios de los que habían recibido una dosis real del antígeno desarrollaron síntomas posteriormente. Su vacuna tuvo un éxito del 94% en las personas mayores de 65 años, uno de los colectivos más vulnerables de la crisis de la Covid-19. Era la gran noticia del año para la compañía.
Pfizer se enfrenta al problema de la baja temperatura
Con buena parte de sus contratos ya comprometidos, la farmacéutica tiene que lidiar en el tramo final de la carrera con un problema añadido. Su vacuna debe conservarse a una temperatura de 80 grados bajo cero para no perder sus propiedades. Una condición que pone en jaque los planes de distribución internacional de los viales.
Ante la falta de un plan por parte los gobiernos, la farmacéutica diseña unos dispositivos para poder mantener ultrafrías las dosis. Las vacunas se introducirán en paquetes que irán rodeados de hielo seco. Unos contenedores capaces de mantener esa temperatura durante un máximo de 30 días. Esa horquilla de tiempo determinará el futuro de la inmunización mundial.
2 de diciembre: Pfizer estrena la vacuna en Reino Unido
Los buenos datos de eficacia del antígeno permitieron a Pfizer obtener su primera autorización oficial. Reino Unido se convirtió el 2 de diciembre en el primer país occidental que daba luz verde a una vacuna contra la Covid-19. Las autoridades británicas recurrieron al uso de emergencia para facilitarlo.
Poco después, le seguirían media docena de países. Estados Unidos, México, Canadá, Arabia Saudí o Bahréin fueron los primeros en seguir sus pasos. Fue el pistoletazo de salida para el inicio de las campañas de vacunación.
Las reacciones alérgicas ponen en jaque el éxito de Pfizer
Sin embargo, los primeros días no todo salió según lo previsto. El inicio de la campaña de vacunación en Reino Unido estuvo marcado por las dudas sobre la seguridad. Dos sanitarios del país desarrollaron una severa reacción alérgica tras recibir las primeras inyecciones del diseño de Pfizer.
La alerta provocó que los responsables de la campaña en Reino Unido lanzaran un llamamiento público para recomendar que todas las personas alérgicas no se vacunasen.
La dirección de la farmacéutica estadounidense ofreció una rápida respuesta para respaldar la seguridad de la vacuna que continúo administrándose de forma regular. Los investigadores apuntan ahora a que un compuesto de polietilenglicol puede estar detrás de estas reacciones.
21 de diciembre: La Agencia Europea del Medicamento aprueba la vacuna
La decisión se hizo esperar, pero finalmente la Agencia Europea del Medicamento (EMA) dio el 21 de diciembre su visto bueno a la comercialización de la vacuna en todos los países miembro del bloque. Los reguladores sanitarios concluyeron su revisión acelerada de los datos, entre las presiones de algunos países como Alemania, golpeados por los rebrotes.
Fue en ese momento, cuando la Comisión Europea articuló el reparto de las dosis entre los 27 estados europeos. Todas saldrían desde la fábrica que está ubicada en la localidad belga de Poors en avión y protegidas por el hielo seco.
27 de diciembre: España vacuna a la usuaria de una residencia de Guadalajara
El proceso ha concluido este domingo con el inicio de las vacunaciones que se ha producido de forma simultánea en todo el viejo continente. España ha escogido la residencia de Los Olmos de Guadalajara para realizar la primera inyección. Araceli, de 96 años, pasará a la historia como la primera residente española que se ha protegido contra la Covid-19.
Tras el pistoletazo de salida, las 17 comunidades autónomas han activado sus planes para inmunizar a la población más sensible. Personas mayores de las residencias y los profesionales sociosanitarios que trabajan con ellos. Ya han llegado las primeras 9.750 dosis. El principio del fin de la pandemia y el último paso de la carrera internacional de la vacuna.