Otro revés judicial para el Gobierno: el TS anula el nombramiento de Margarita Valerio al frente del Consejo de Estado
El Tribunal Supremo considera que Valerio no cumple con el requisito de ser una “jurista de reconocido prestigio” para estar en la presidencia de ese consejo
El nombramiento de Valerio en el Consejo de Estado fue tumbado por el TS. Foto Consejo de Estado
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En poco menos de una hora el Gobierno ha recibido dos varapalos por parte de los órganos judiciales. Poco después que el Consejo General del Poder Judicial rechazara la nominación de Álvaro García Ortiz como fiscal general del Estado, el Tribunal Supremo anuló el nombramiento de Margarita Valerio como titular del Consejo de Estado.
La razón del TS para tumbar el cargo es que considera que Valerio no cumple con el requisito legal de ser una “jurista de reconocido prestigio”.
El requisito que le falta a Valerio
La sentencia, de la que ha sido ponente el magistrado de la Sala Pablo Lucas, precisa “son dos las condiciones que debe reunir quien asuma la presidencia de este órgano. No hay excepción, ni matización, ni preferencia de la una sobre la otra. Y la razón de ser de ambas es distinta pero concurrente: asegurar que quien esté al frente del Consejo de Estado reúna la doble cualificación que quiere el legislador. Es decir, prestigio jurídico y conocimiento experto de los asuntos de Estado”.
Sí se avala su carrera en el ámbito público
Así, La Sala de lo Contencioso-Administrativo ha dado luz verde a un recurso presentado por la Fundación Hay Derecho, que había elevado la propuesta del rechazo.
En todo caso, Valerio sí cumple con una de las exigencias que marca la Ley Orgánica, que es la de tener experiencia en asuntos de Estado, ya que ha sido ministra de Trabajo entre 2018 y 2020, Diputada regional de las Cortes de Castilla-La Mancha (2007-2010) y Diputada en el Congreso en las legislaturas X, XIII y XIV, entre otros cargos políticos e institucionales.
El nombramiento de Valerio se había concretado el 31 de octubre del año pasado, en reemplazo de María Teresa Fernández de la Vega, quien dejó su puesto tras haber estado cuatro años en esa entidad.
