Los gerentes de las mutuas Asepeyo, Fremap y Mutualia cobran 2,6 veces el sueldo de Rajoy

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, con la ministra de Empleo, Fátima Báñez, como persona interpuesta, y la CEOE libran la última gran batalla de la legislatura. El Gobierno cuenta con el respaldo del presidente de la patronal, Juan Rosell, para desplegar la nueva ley de mutuas, que además de atacar el absentismo laboral, mete en cintura los salarios a cargo del erario que cobran los gerentes de estas instituciones. En los siete años de crisis, los directivos no han aceptado, salvo honrosas excepciones, ni un euro menos de retribución a final de mes.

Los presupuestos de la Seguridad Social sostienen emolumentos que superan los salarios de las más altas instituciones del Estado. Los tres mejor pagados acumulan una retribución conjunta de 628.830 euros al año, que supone una media de 209.610 euros. Es decir, 2,6 veces el sueldo de Rajoy (78.185 euros) y 1,6 veces el mayor sueldo público, que corresponde el presidente del Tribunal Supremo. La brocha fina dibuja la siguiente comparativa.

Los tres más beneficiados

El director gerente de Asepeyo, Jorge Serra, percibe 225.080 euros (2,9 veces Rajoy); el de Fremap, Jesús María Esarte, ingresa 213.990 euros (2,7 veces Rajoy); y el de Mutualia, Miguel Angel Lujua, es beneficiario de 194.840 euros anuales (2,5 veces Rajoy). Las cifras incluyen salarios base y suplementos. Cuando la ley de mutuas entre en vigor se fijará un tope salarial de 100.000 euros. Sólo el máximo responsable de Solimat, Javier López (89.740 euros), tiene la retribución ya adaptada a la futura normativa.

El resto de los responsables de la gestión de las 20 mayores mutuas españolas perderán una parte importante de sueldo. La media, según los presupuestos de 2014, es de 158.000 euros y esta cifra explica la rebelión que los ejecutivos más agraviados han emprendido. El mas beligerante es Lujua, presidente también de la patronal vasca Confebask.

El jueves pasado el pleno del Congreso dio luz verde a la ley de mutuas en la comisión de empleo. De este modo el texto daba los últimos pasos hacia su aprobación definitiva en el Senado. Además de limitar retribuciones, se ampliarán las incompatibilidades y se endurecen las reglas de gobernanza de las instituciones. También introduce cambios para los trabajadores al eliminar burocracia en la tramitación de los expedientes de incapacidad temporal, que las mutuas podrán controlar desde el primer día. La decisión final, sin embargo, seguirá en manos de los médicos.

Los salarios, uno a uno: