José Luis, se fuerte
Ha pasado un mes desde que estallara el caso Koldo y el exministro José Luis Ábalos todavía no ha sido imputado.
Aguanta Luis. Se fuerte. Nada es fácil pero hacemos lo que podemos. Ánimo.
En el caso Koldo no hay, que se sepa de momento, mensajes de apoyo de Pedro Sánchez al que fuera Ministro de Transportes, José Luis Ábalos.
No hay mensajes que emulen aquellos sms publicados por el diario El Mundo en 2013 entre Luis Bárcenas y el expresidente Mariano Rajoy, cuando se avecinaba sobre el antiguo tesorero del PP, y también sobre el partido, una tormenta judicial y mediática por la contabilidad B.
A la postre, la investigación sobre Bárcenas terminaría con Rajoy refugiándose en un restaurante cercano al Congreso mientras Pedro Sánchez sacaba adelante una moción de censura que le convertiría en nuevo Presidente del Gobierno.
El 1 de junio de 2018 Rajoy abandonó el hemiciclo a las 14 horas siendo Presidente, se fue a comer al restaurante Arahy, en la calle Alcalá, en compañía de allegados como María Dolores de Cospedal, y salió del local a las 22.00 horas, ya sin opciones políticas.
En lugar de sms de apoyo, en el caso Ábalos ha habido una redirección del tiro político y mediático hacia el caso que afecta a la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Si el caso Koldo desvió la atención de la Ley de Amnistía, la polémica por el presunto delito fiscal cometido por Alberto González Amador ha rebajado la tensión sobre Ábalos.
A pesar de la profundidad de los delitos que se investigan en el caso Koldo, cometidos durante la crisis sanitaria en la que murieron más de 120.000 personas en España, que no solo salpican a Ábalos, también a la presidenta del Congreso, Francina Armengol, y al ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, el caso de la pareja de Ayuso ha provocado un torrente informativo aun mayor.
No solo eso. Cientos de personas se manifestaron el miércoles en la sede del PP, en la calle Génova de Madrid, exigiendo la dimisión de Ayuso.
Caza mayor
Ábalos no tiene cuentas en Suiza, como sí las tenía Bárcenas. El exMinistro de Transportes, hoy en el Grupo Mixto del Congreso, elude sus responsabilidades por el escándalo de la trama que presuntamente delinquió en contratos millonarios de compra de material sanitario durante la pandemia asegurando que él no se ha forrado.
Pero que Ábalos no hubiera sacado rédito económico de los bussiness de su amigo Koldo con las mascarillas, no le libra de responsabilidad política. Ni judicial.
La relación entre Koldo y Ábalos era tan estrecha que es difícil creer que el exMinistro no supiera qué estaba ocurriendo. Ha pasado un mes desde que estallara el escándalo de la trama de las mascarillas y José Luís Ábalos todavía no ha sido imputado.
Este diario ha publicado que Fiscalía tenía la intención de imputar a Ábalos por el escándalo de las mascarillas. Fuentes consultadas por este diario que han mantenido contactos con miembros de Fiscalía durante las investigaciones, aseguran que estos les indicaron que tenían al exMinistro en el punto de mira. «Caza mayor«, dijeron.
El pasado 21 de febrero, cuando comenzaron las detenciones, Ábalos se encontraba en el Congreso. «Me he quedado estupefacto con esto…», acertó a decir ante los periodistas. «En fin, espero que no les pase a ustedes…», declaró.
El sumario del caso, como ha publicado este periódico, revela que uno de los empresarios que acaparan buena parte de la investigación, Juan Carlos Cueto, trató que Koldo García pidiera la intercesión de Ábalos al sentirse investigado.
«Koldo estaría llevando a cabo sus gestiones para que la reclamación de Baleares no prosperase a través de dos personas distintas», dice el sumario. «La observación de las comunicaciones y la actividad operativa realizada por esta unidad ha permitido concluir que estos intermediarios serían José Luis Ábalos y Jacobo Pombo [un empresario]», añade.
La intervención de las comunicaciones muestra que, tras las llamadas de Cueto a Koldo, este se reunió en el reservado de la marisquería La Chalana con Ábalos, durante algo más de una hora, el pasado día 10 de enero.
Los investigadores aluden también en el sumario a la implicación de un hermano de Koldo, quien habría entregado ciertos «papeles» a Ábalos. Una documentación con la que habría entrado en la casa del exMinistro y de la que habría salido sin ella: hay fotos de la Guardia Civil.
¿No existen indicios suficientes para imputar a Ábalos? ¿Le tiembla el pulso a la Fiscalía?