Jordi Cañas cumple y abandona su escaño
El diputado de Ciutadans decide dejar de ser diputado tras recibir una providencia del TSJC como imputado en un presunto caso de fraude fiscal
La palabra es la palabra, y Jordi Cañas dejará de ser diputado del Parlament el próximo lunes. El dirigente de Ciutadans aseguró en su día que renunciaría a su escaño en el momento en el que recibiera la providencia del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya, como imputado en un supuesto fraude fiscal. Y esa providencia la recibió este jueves.
Cañas ha asegurado este viernes que el lunes dejará formalmente su acta de diputado en el Parlament, como un gesto que honra a sus votantes, a los que le han dado su “apoyo y confianza”. Asume que ya no tendrá la condición de aforado y que será tratado como un ciudadano más. “No quiero dar ejemplo, pero espero tener un comportamiento ejemplar”, ha asegurado uno de los dirigentes, junto con Albert Rivera, más activos de Ciutadans.
Oriol Pujol y Daniel Fernández, siguen
La cuestión es que los partidos políticos siguen sin tener una estrategia clara sobre la condición de un imputado. Para CiU y PSC es totalmente lógico que un político pueda mantener sus responsabilidades públicas, aunque esté imputado en una causa. Esa condición sólo significa que, a partir de ese momento, podrá contar con una defensa legal. Pero también expresa que hay sospechas fundadas de que ha cometido un delito.
Y en esa circunstancia está Oriol Pujol Ferrusola, imputado en el caso ITV, que sigue como diputado en el Parlament. O el socialista Daniel Fernández, imputado en el caso Mercurio, que sigue en la cámara catalana, también como diputado.
No será el caso de Jordi Cañas, que, desde el primer momento, aseguró que renunciaría a su escaño, y que, posteriormente, si el partido lo ve bien, regresaría si la causa judicial acaba en nada. Por ello, y confiado en su inocencia, Cañas ha sido concluyente: “Volveré”.
Posible fraude contra la Hacienda Pública
Cañas cometió, supuestamente, un delito de fraude fiscal antes de dedicarse a la política, en su vida como profesional, pero ha querido apartarse por un tiempo. “En momentos en que la confianza en la política está en juego, espero que mi decisión honre a la política y a las instituciones”.
En la providencia del TSJC se considera que “puede considerarse indiciariamente que el señor Jordi Cañas, atendida la existencia de relaciones personales y profesionales con quien parece ser el organizador del entramado societario y de la operativa para llevar a cabo la defraudación tributaria, el desempeño de cargos de administrador y de socio en empresas del Grupo Corbelia, así como la recepción de una factura que no parece responder a ningún servicio o prestación real, participó en el entramado societario y en la operativa dirigida a la defraudación tributaria del Impuesto de sociedades, del ejercicio 2005, por parte de la mercantil INMA & MARC HABITATGES, S.L. En un importe de 429.203,45 euros”.
La providencia considera, por tanto, que Jordi Cañas “pudo haber participado en hechos susceptibles de ser calificados como un delito contra la Hacienda Pública”.