El Gobierno confía en el diálogo con los sindicatos para frenar la huelga por el traspaso de Cercanías
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana en funciones, Raquel Sánchez, ha prometido garantizar el derecho de los trabajadores en el traspaso de Cercanías
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana en funciones, Raquel Sánchez, ha afirmado este martes que está «hablando» con los sindicatos para que desconvoquen la huelga en Renfe y Adif por el rechazo del traspaso de Rodalies a la Generalitat. Esta era una de las exigencias de ERC para apoyar al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, en su investidura.
Así lo expuso a la ministra en declaraciones a los medios con motivo de la reunión informal ministerial de Vivienda y Desarrollo Urbano que se celebra este martes en Gijón en el marco de la presidencia española del Consejo de la Unión Europea y que abordará los principales retos del sector.
Sánchez promete velar por el derecho de los trabajadores
Sánchez ha asegurado que en el traspaso de Cercanías a la Generalitat “los derechos de los trabajadores van a estar garantizados, incluyendo la movilidad laboral”. Las dudas sobre el mantenimiento de las condiciones laborales de estos trabajadores son el motivo por el que los Comités Generales de Empresa de Adif y Renfe Operadora acordaron el pasado martes paros los próximos días 24 y 30 de noviembre y 1,4 y 5 de diciembre.
La ministra de Transportes ha afirmado que desde su departamento están “hablando con ellos para intentar desconvocar esas huelgas”. Los paros convocados coinciden con la llegada de la Alta Velocidad a Asturias, prevista para el 29 de noviembre, pero Raquel Sánchez ha subrayado que asegurarán los servicios mínimos para que no impidan la inauguración de la línea.
Traspaso integral
El traspaso no es solo operativo: el acuerdo habla de un traspaso integral, con lo que también incluiría la financiación de esta red de ferrocarriles operados por Renfe. En los presupuestos generales para este año se han destinado 1.012 millones de euros para la red de Rodalies, monto que representa el 40% de lo que el Estado ha invertido en infraestructuras en Cataluña, o sea 2.556 millones.
La posesión integral del Govern de estos ferrocarriles sería gradual, para facilitar la gestión por ambas partes y también para evitar conflictos con gremios como el de los maquinistas, que se oponen a depender laboralmente de la Generalitat.
Tras el anuncio, los trabajadores de Renfe y Adif convocaron cinco días de huelgas al considerar que este acuerdo entre ERC y el PSOE perjudica directamente a sus condiciones laborales y a la gestión de Rodalies.