El Gobierno confía en que Bruselas retire los peajes en autopistas para 2024
La ministra, Raquel Sánchez, reitera la voluntad del Gobierno de evitar el sistema de pago por uso en autopistas y espera que Bruselas acepte propuestas alternativas
La ministra española de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana en funciones, Raquel Sánchez, expresó su optimismo este martes en relación con la posibilidad de que la Comisión Europea elimine del plan de recuperación español la introducción de peajes en autopistas en 2024. Además, reafirmó la determinación del Gobierno de «no aplicar ningún sistema de pago por el uso de autopistas».
«Ya dijimos que la voluntad del Gobierno no es aplicar ningún sistema de pago por uso en autopistas», ha recalcado en declaraciones a los medios en el Parlamento Europeo en Bruselas. Además, destacó que «las condiciones que se daban en el momento que se planteó esta medida no son las mismas que en la actualidad».
La cuestión de los peajes forma parte del plan de recuperación español como el hito número 3, que establece la creación de «un mecanismo de pago por el uso de las carreteras del Estado, que comenzará a funcionar a partir de 2024, con arreglo al principio de ‘quien contamina paga'». Esto implicaría el desembolso del sexto tramo del fondo de recuperación, que asciende a 8.000 millones de euros.
Las alternativas
Sin embargo, el Gobierno español presentó propuestas alternativas en el marco de la adenda al plan de recuperación, buscando reforzar medidas ya aplicadas, como el impulso al transporte ferroviario y público.
A pesar de que la fecha límite para emitir un veredicto sobre la adenda al plan de recuperación ya pasó, los servicios del Ejecutivo comunitario continúan evaluando la propuesta.
«Nos consta que la Comisión lo está analizando y que podemos compartir ese criterio, ese análisis y esa visión compartida que nos permite ser optimistas», ha apostillado.
Si la Comisión Europea aprueba el plan de recuperación revisado, España tendrá acceso a otros 84.000 millones de euros en créditos y a 10.000 millones de euros en nuevas transferencias que se sumarán a los 70.000 millones ya disponibles.