El rey Felipe VI insta a trabajar por una España “sin divisiones ni enfrentamientos”

El rey Felipe VI ha inaugurado la XV Legislatura con un discurso que ha girado en torno al reclamo de cohesión entre las fuerzas políticas, donde el “reconocimiento de las diferencias” pueda dialogar con una España “sólida y unida, sin divisiones ni enfrentamientos”.

El discurso del monarca ha buscado un punto de equilibrio ante una Legislatura fragmentada en dos grandes bloques: por un lado, el del PSOE con la coalición de partidos que posibilitaron la investidura de Pedro Sánchez, que van desde los independentistas de Junts y ERC a Bildu (quienes se ausentaron cuando Felipe VI tomó la palabra), pasando por fuerzas nacionalistas conservadoras como el PNV y las agrupaciones de izquierda lideradas por Sumar.

Por el otro, la oposición liderada por el PP de Nuñez Feijóo que con 137 escaños es el bloque más numeroso; a los que se suman sus aliados de Vox.

Ante esta amalgama de colores políticos el rey dijo que espera que el pluralismo político del Parlamento contribuya «al bien común de todos los españoles».

Acompañado por la reina Letizia y la princesa Leonor, Felipe VI ha reivindicado el acuerdo que desembocó en la Constitución, de la que ha pedido “honrar su espíritu, respetarla y cumplirla”.

Felipe VI ha pedido a los legisladores que trabajen por una España “sólida y unida, sin divisiones ni enfrentamientos”

Tras felicitar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por su reelección, ha deseado que “la integración de diferentes opciones y proyectos dentro de la Constitución”, contribuya a “la mejora de las condiciones de vida de las personas”.

El rey insta a cumplir con la Constitución

Como era de esperar, el monarca no se refirió a la tramitación de la Ley de Amnistía que está marcando la agenda política de la Legislatura, sino que ha optado por emplazar a “respetar y cumplir” la Constitución para “hacer efectiva la definición de España como un Estado social y democrático de derecho”.

“La búsqueda del entendimiento, el reconocimiento de nuestras diferencias, unido al mutuo respeto como ciudadanos, la certeza de que solo superando las divisiones tienen una base segura las libertades y los derechos, fueron todas ellas ideas y actitudes determinantes para abrir una nueva página de nuestra historia”, ha resaltado.

Un futuro democrático para los jóvenes

Gran parte del discurso se ha centrado en los jóvenes. Para Felipe VI, las nuevas generaciones necesitan afrontar el futuro con confianza con un marco democrático que les permita “convivir y prosperar en libertad”.

A juicio del rey, para los jóvenes, “la democracia no es una aspiración”, como lo fue para sus padres y abuelos, sino una realidad, y tienen “la obligación cívica de perfeccionar y acrecentar” los logros que trajo el pacto constitucional, que permitió alumbrar una España “ilusionada, confiada en su futuro” con “un espíritu inclusivo de ideales”.

Felipe VI ha animado a “honrar ese legado, un legado de grandeza, responsabilidad y sentido de la historia, y a poner en valor “la historia del gran éxito colectivo” de la democracia, cimentado en “el entendimiento mutuo, sin imposiciones, ni exclusiones, y en la voluntad de integración que enriquece, con la diversidad y el pluralismo, el proyecto común como nación”.