ERC prepara una moción de censura en la Diputación de Barcelona para dejar en evidencia a JxCat
ERC fuerza un pleno sobre corrupción en la Diputación de Barcelona al que seguirá una moción contra su presidenta, la socialista Nuria Marín
ERC se propone poner en aprietos al PSC y a Junts per Catalunya por su pacto de gobierno en la Diputación de Barcelona cuando se está a las puertas de las elecciones catalanas del próximo 14 de febrero (14F). Intentan matar a dos pájaros de un tiro.
ERC forzará un pleno monográfico sobre corrupción en la Diputación de Barcelona para que su presidenta, la socialista Nuria Marín, que también lo es del PSC, comparezca en enero para dar explicaciones de su detención por el caso de las subvenciones del Consejo del Deporte de L’Hospitalet de Llobregat.
En función de las declaraciones que ofrezca Marín, los republicanos se plantean presentarle una moción de censura. Marín preside la Diputación barcelonesa gracias a un pacto de gobierno entre el PSC y Junts per Catalunya.
El pleno extraordinario sobre corrupción solicitado por el grupo republicano debe programarse para este enero, tal como contempla en reglamento de la corporación. Más adelante se convocaría la moción de censura.
El doble objetivo de ERC: la comparecencia de Nuria Marín por el escándalo de las subvenciones y que JxCat se retrate sobre el apoyo que le brinda
Con estas iniciativas en la Diputación de Barcelona, los republicanos persiguen un doble objetivo: por una parte, forzar la comparecencia de la presidenta del PSC por un caso de presunta corrupción que afecta a su partido y, por otra, que JxCat se retrate sobre su apoyo a los socialistas en pleno período electoral.
ERC cuenta con 16 diputados provinciales en un pleno de 51, que son suficientes (al superar la cuarta parte) para forzar el pleno monográfico de enero pero insuficientes para superar la posterior moción de censura contra Marín. Para ello requerirían el voto favorable de otras formaciones políticas.
Para que prospere la moción de censura contra Nuria Marín (PSC) es necesario que la voten a favor sus actuales socios de gobierno del Pdecat
Los republicanos necesitan el apoyo de otros diez diputados provinciales para ganar la moción de censura. Que los consigan será complicado. Bucarán el apoyo de los cinco diputados de los comuns, con los que ya mantienen conversaciones, y de los cinco de JxCat, aunque hasta ahora siempre han rechazado de plano tal posibilidad.
Ni Ciudadanos ni el Partido Popular apoyarán la censura porque significaría quitar la presidencia a una constitucionalista para entregársela a un independentista.
Con esta moción de censura, los republicanos desgastan a JxCat, sus actuales socios en el gobierno de la Generalitat. Además, en cada pleno provincial, ERC recuerda que JxCat incumple el compromiso de restituir el lazo amarillo en la fachada de la Diputación de Barcelona.
Probablemente, la moción de censura se votará después de las elecciones del 14F. Por lo tanto, las nuevas mayorías en el parlamento catalán y, en consecuencia, los pactos en la Generalitat podrían repercutir en la Diputación.
El grupo de JxCat sufrió una escisión. De sus siete miembros iniciales, dos se encuadran ahora en el Pdecat. Sin embargo, todos son fieles a Marín. Esta escisión provocó un reparto de asesores entre las dos formaciones. Su retribución conjunta asciende a 1,33 millones de euros.