El TSJC desactiva la Ășltima estratagema de Quim Torra
El TSJC desestima todos los argumentos de la recusaciĂłn de Torra contra los jueces de su causa por los lazos amarillos
No tendrá recorrido la última maniobra de Quim Torra para escoger a los jueces de su causa por negarse a retirar los lazos amarillos y otros símbolos independentistas de los edificios públicos de la Generalitat cuando se lo ordenó la Junta Electoral Central (JEC). El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha desestimado este viernes el recurso del presidente catalán con el que pretendería apartar del juicio al presidente del tribunal Jesús María Barrientos y a la magistrada Mercedes Armas.
El alto tribunal catalán ha refutado todos los argumentos de Torra en su escrito de recusaciones, admitido a trámite el pasado 12 de septiembre. Torra alegaba, por ejemplo, que el magistrado Barrientos carecía de toda imparcialidad por haberse pronunciado públicamente a espectos sobre el procedimiento. El TSJC ha afirmado en su auto de este viernes que ninguno de los comportamientos públicos del presidente del tribunal demuestran «una pérdida de imparcialidad objetiva o subjetiva por su parte, sea por razón de ostentar un interés en la causa o de profesar una enemistad manifiesta hacia el acusado».
Las recusaciones que Torra presentó en septiembre obligaron a los jueces a aplazar el juicio, que se iba a celebrar el 25 y 26 de septiembre, y ahora se celebrará el próximo 18 de noviembre. Ante el escrito del president, el tribunal acordó que los magistrados se abstuvieran de conocer la causa hasta que se resolvieran las peticiones de Torra, razón por la que decidieron cambiar la fecha del juicio. Torra es acusado por presunta desobediencia y la Fiscalía pide 20 meses de inhabilitación por ignorar los requerimientos de la JEC en periodo electoral.
El TSJC no ve parcialidad en los jueces de Torra
El auto del TSJC, contra el que no cabe recurso, dice que las posiciones públicas de Barrientos sobre el procés se efectuaron en su «condición de presidente del TSJC y, por lo tanto, representante del poder judicial en ese territorio, en ejercicio de la innegable libertad de expresión que le corresponde, acrecentada por el rol institucional inherente a su cargo». Las declaraciones del presidente del tribunal no pueden ser «leídas y valoradas más que desde una perspectiva institucional, sin interferencia alguna en los procesos entonces en curso», añade.
Entre las recusaciones de Torra también estaba que Barrientos abandonó un acto en el Colegio de Abogados de Barcelona cuando el presidente del Parlament de Cataluña, Roger Torrent, habló de «presos políticos». Pero el TSJC entiende que esa conducta «intrascendente» no guarda relación con el objeto de litigio, por lo que la denuncia no es de recibo. Otro asunto que irritó al president que Barrientos se manifestase a favor de la retirada de los lazos amarillos, lo que para el TSJC «tampoco es una muestra reveladora de una pérdida de imparcialidad objetiva».
El alto tribunal catalán también ha descartado que Barrientos y Armas conocieran anteriormente la causa, como ha denunciado Torra. En cualquier caso, el auto dice que las declaraciones de Barrientos sobre el procés no contenían «ninguna referencia personal al señor Torra o a conductas concretas desplegadas por el mismo», por lo que no se advierte «la animadversión o aversión que constituyen la base de la recusación».
Otra pelea de Torra con la JEC por los lazos amarillos
El juicio por los lazos amarillos de Torra no es el único hecho relativo a este símbolo independentista en el que se ha inmiscuido el president. De cara a las elecciones generales del 10 de noviembre, Torra ha sido obligado nuevamente a retirar los lazos y otros símbolos de los edificios públicos de la Generalitat, y esta vez ha cumplido a tiempo, aunque no sin llevar el asunto hasta las últimas consecuencias. El líder independentista presentó el pasado viernes 4 de octubre un recurso de reposición ante la JEC contra la orden de retirar los símbolos.
Sin embargo, Torra envió el texto en catalán, y la JEC pidió el pasado miércoles que enviase el recurso de nuevo en castellano antes de este viernes y, si no lo hacía, constaría como no entregado el escrito. Torra ha enviado un escrito de alegaciones también en catalán en el que asegura que el Estatuto de Autonomía y la Carta Europea de las Lenguas Regionales o Minoritarias le amparan para utilizar el catalán en este caso. Así las cosas, Torra ha confirmado en un escrito de alegaciones, también en catalán, que no va traducir el anterior documento.