El PSC se quita la máscara y dice ‘Basta’

CiU presiona a los socialistas que piden ya dejar de lado el derecho a decidir y buscar en 2015 la reforma de la Constitución

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‘Basta’. Se ha acabado la ficción. Fin del viaje. El PSC, que sufre una enorme sangría electoral, mostrada en las últimas encuestas, –perdería su condición de tercera fuerza en beneficio de Ciutadans– quiere dejar atrás su timidez sobre el derecho a decidir y plantea ya, sin ambages, que se deje de lado la petición sobre la consulta, con el objetivo, que siguen manteniendo CiU y ERC, de convocar un referéndum en 2014.

Aunque el portavoz del PSC, Jaume Collboni, expresara este lunes la defensa de una consulta “siempre que sea legal y acordada”, para votar una resolución en el Congreso en esa dirección, los socialistas han decidido dejar de jugar a lo que entienden que es una “ficción”. Consulta acordada, sí, pero “como no se permite esa consulta, no habrá referéndum legal, y, por tanto, no se hará”, apunta un miembro de la dirección del entorno del primer secretario, Pere Navarro.

Objetivo, 2015

El ex presidente de la Generalitat, José Montilla, afirmó este lunes que el President Artur Mas, al plantear una consulta con una pregunta y una fecha concreta, que se debe fijar antes de que acabe este año, para convocarla en 2014, ya está renunciando a ella.

Porque el Gobierno de Mariano Rajoy ha dejado muy claro que no aceptará que se convoque un referéndum de autodeterminación sobre una de las partes que conforman el pueblo español, como señala la Constitución. Por tanto, el PSC quiere ya pensar en 2015, en el 1 de enero de 2015, cuando se compruebe que, a lo largo de 2014, no se habrá celebrado ninguna consulta.

¿Y los críticos?

Los socialistas, por tanto, no quieren jugar a más equívocos. La pérdida progresiva de apoyo electoral se atribuye a la falta de una posición clara. Prueba de esa determinación, que, por ahora, no la percibe el ex votante socialista, es que Pere Navarro no dudó en minimizar la salida de Montserrat Tura del consejo nacional del PSC. Es decir, no hubo ningún intento de que Tura decidiera cambiar de opinión. Los críticos del PSC, enmarcados en una corriente más catalanista, o cercana a las tesis de CiU y ERC, no inquietan a la dirección del PSC.

La idea es que el partido se puede hacer más pequeño, pero con un proyecto concreto, que permita crecer después. Y, hasta ahora, la dirección socialista estaba incómoda. Porque se fijó la defensa del derecho a decidir en el programa electoral sin mucho convencimiento, y ahora se ha visto la oportunidad para alejarse. No, sin embargo, de cualquier modo.

Advertencia al PP

Collboni expresó este lunes una consideración que toda la dirección comparte. “Haría mal el PP y el PSOE en desdeñar la necesidad de consultar a los catalanes”, se asegura desde la sede del PSC, aunque Collboni se refiriera directamente al PP con la advertencia de que «no crea que la solución sólo es jurídica», con una defensa cerrada de la ley.

El PSC entiende que la puerta abierta por el PSOE debe ser la respuesta. Una reforma de la Constitución, que algunos dirigentes del PP también defienden –el propio presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González lo hizo este lunes– precisaría de un referéndum.

Y está claro que si ese referéndum “tuviera unos resultados poco satisfactorios en Catalunya, que no se aprobara, entonces está claro que la vía debería ser otra”, se añade. Tampoco se deja de lado la posibilidad de que esa misma reforma de la Constitución incluyera la propuesta de convocar una consulta en Catalunya, aunque eso lo rechaza el PSOE.

Público y privado

Pero el PSC, en todo caso, quiere romper la distancia entre el discurso privado y el público. Y, “en privado”, como ha apuntado Montilla, Navarro, –este pasado fin de semana–, y Miquel Iceta, –el pasado viernes–, los dirigentes catalanes admiten que en 2014 no habrá consulta.

Pese a ello, CiU y ERC siguen muy interesados en poder contar con el PSC. La posición de los socialistas, al margen de que puede soldar internamente lo poco que quede como estructura, puede provocar dudas en sus adversarios políticos.

Convergència mantiene su rumbo

El secretariado permanente de Convergència Democràtica se reunió este lunes para concluir que, pese a las encuestas, en las que CiU pierde su posición de primera fuerza política en beneficio de Esquerra Republicana, “se mantendrá el guión y la apuesta por la consulta”.

En palabras de Josep Rull, “nada debe crear nervios”. También Lluis Corominas, con quien Rull conforma la máxima dirección del partido, se refirió a esa necesidad de mantener el plan previsto, con un mensaje a la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho. “Si está en contra de la consulta, no está amenazando al President Mas, sino a la propia democracia”.

Convergència también ha analizado el editorial de La Vanguardia, en el que se defendía, este domingo, la moderación para poder encontrar una salida política. Los dirigentes de Convergència se consideran, ellos mismos, “unos moderados”, al entender que están buscando “instrumentos para que la sociedad catalana pueda vivir mejor”, y esos instrumentos son las estructuras de estado que se buscan con la independencia.

“Nos sentimos extraordinariamente pragmáticos”, aseguró Josep Rull.

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