El Gobierno admite que impidió la visita del Rey a Cataluña para no molestar a los independentistas
El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, achaca su ausencia a una cuestión de "convivencia" en Cataluña
El Gobierno ha dado explicaciones por primera vez sobre las razones por las que el rey Felipe VI no acudió a Barcelona al acto de entrega de despachos de los nuevos jueces. La cercanía de la visita con la inminente sentencia de inhabilitación del presidente de Cataluña, Quim Torra, y con la celebración del tercer aniversario del referéndum ilegal son los motivos.
El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha explicado las razones que no tuvieron nada que ver con la protección personal del monarca, sino con cuestiones de índole político. «El Gobierno tiene la obligación de velar no solo por la seguridad, que por supuesto la tiene, sino por la convivencia», ha expresado en una entrevista en Radio Nacional.
Para tratar de evitar conflictos y contentar a los partidos nacionalistas, el Gobierno intentó postergar la entrega de los despachos más allá de la conmemoración del 1 de octubre, sin embargo se encontró con el rechazo de Carlos Lesmes. “Hubo un intento de que el acto se aplazara y el presidente del Consejo General del Poder Judicial dijo que no”, ha aclarado el ministro de Justicia.
Campo ha dirigido sus dardos directamente hacia el máximo representante del órgano de gobierno de los jueces, que ha protagonizado buena parte de las críticas por la ausencia del monarca en los últimos días. “Si se podía hacer unos días después ¿por qué íbamos a generar una tensión?”, ha subrayado.
Campo niega conflictos con la Casa Real
El titular de Justicia ha aprovechado su intervención para dar un espaldarazo a la actuación del Rey que informó por nota sobre la decisión de no viajar a Barcelona y que incluso telefoneó a Lesmes para comunicarle que no estaría presente en el acto. En ese sentido, ha expresado que no hay “ningún frentismo con la Casa Real, en absoluto”.
Más allá de las explicaciones, el ministro ha lamentado el conflicto político que ha despertado la decisión del Gobierno en un acto protocolar de su departamento. “Todo ha sido un tanto extraño pero tampoco hay que hiperbolar, lo importante es que el Poder Judicial cuenta con una nueva promoción”.
La ausencia del Rey provocó una tormenta política
La ausencia de Felipe VI en Cataluña desató un torbellino de reacciones políticas. El líder del Partido Popular, Pablo Casado, ha sido uno de los más críticos con la gestión del Gobierno, al que acusa de provocar una “terrible erosión de las instituciones democráticas”. Ha llegado incluso a cambiar su foto de perfil de Twitter por la del monarca, como gesto de empatía.
Como es habitual, el Gobierno ha reaccionado con dos caras muy distintas a la situación. Algunos ministros como Pablo Iglesias o Alberto Garzón han puesto en duda la neutralidad de Felipe VI por su llamada a Lesmes, mientras que Campo ha tratado de cerrar filas en torno al monarca para no generar mayores brechas.