El CIS hunde las expectativas electorales de JxCat frente al auge de ERC
El CIS castiga a JxCat y Cs, y premia a ERC, PSC y comunes de cara a las elecciones catalanas del 14-F
El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) pronostica una debacle electoral para Carles Puigdemont en los comicios catalanes del 14 de febrero de 2021 y una holgada victoria de ERC.
Junts per Catalunya (JxCat), el partido que el expresident fugado controla desde Bélgica, se llevaría un duro golpe en las urnas, según el barómetro de noviembre, que señala que solo un 8,1% le votaría, frente al 21,7% que lo hizo en diciembre de 2017.
Las expectativas electorales de Puigdemont el 14-F mejoran levemente si se toma en cuenta la simpatía de quienes inicialmente señalaron que no votarían a ningún partido en las elecciones catalanas. Así, sus apoyos se calculan en un 8,8%.
No obstante, sigue suponiendo la pérdida de casi el 60% de los votantes que en los pasados comicios apostaron por JxCat, cuando era una confluencia y no el partido del expresident.
Si los resultados que prevé el CIS terminan confirmándose en febrero, JxCat podría perder hasta dos terceras partes de sus 34 escaños actuales. Este número de diputados le convirtió en 2018 el principal partido del Govern de coalición con Esquerra Republicana (ERC), que ahora mismo tiene 32 escaños pero que llega a las elecciones con más optimismo pues lidera en casi todas las encuestas (también en la del CIS).
Cuando el organismo dirigido por el socialista José Félix Tezanos ha preguntado a la muestra de encuestados en Cataluña qué partido les gustaría que gobernase en la comunidad autónoma, un 9,3% ha respondido que JxCat. Puigdemont, por su parte, ha reprobado en la valoración, consiguiendo 4 de 10 puntos posibles. Solo un 15,2% ha afirmado que le gustaría que el expresident volviera al Palau de la Generalitat.
El CIS premia a ERC, PSC y comunes
Ante el hundimiento de JxCat, el barómetro del CIS apunta al crecimiento de ERC, el PSC y Catalunya en Comú-Podem.
Lo cierto del caso es que el sondeo de noviembre del CIS —que con motivo de las elecciones catalanas ha incrementado su muestra para estudiar la percepción del electorado de la región— da a ERC la victoria y la capacidad de elegir socios de gobierno, como también lo han hecho otras encuestas. El 20,5% votaría a los republicanos, cuyo apoyo crece hasta el 23,2% si se valora también la simpatía de los votantes inseguros.
ERC en 2017 fue votado por el 23,4% de los catalanes y consiguió 32 diputados; es decir, lograría ahora resultados muy similares pero con importantes cambios en el hemiciclo.
Y es que los socialistas catalanes irrumpirían como segunda fuerza del Parlament, con un 15,2% de intención de voto (ajustado a un 17,3% con la simpatía). Sería un avance significativo para el PSC, que en 2017 logró el 13,9% de los votos y 17 escaños.
Otros que dan un paso al frente son los comunes. El partido liderado por la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que es también una confluencia en la que participa Podemos, sería votado por el 8,7% de los catalanes, según el CIS, que aumenta sus expectativas hasta el 9,9% tomando en cuenta la simpatía. Catalunya en Comú-Podem logró el 7,5% de los votos en 2017 y tiene actualmente 8 escaños en el Parlament.
La CUP, por su parte, casi repetiría los resultados de las elecciones anteriores. El partido independentista lograría los apoyos del 3,8% del electorado catalán y, si se suma la simpatía, el 4,5%. El 21-D, la CUP consiguió cuatro diputados con poco menos del 4,5% de los votos.
Ciudadanos, en caída libre (según el CIS)
El partido que ganó las elecciones de 2017 (y que no pudo gobernar por lograr JxCat y ERC la mayoría con apoyos externos) estaría lejos de volver a ser líder en el Parlament después del 14-F, según varias encuestas, la más reciente siendo la del CIS. Todo apunta a que la apuesta por Carlos Carrizosa como candidato en Cataluña no ha dado los frutos deseados.
Ciudadanos solo tendría el respaldo del 8,2% de los catalanes, o del 8,8% si se toma en cuenta la simpatía de los votantes que inicialmente aseguraron que no votarían a nadie en febrero. Es un declive monumental desde el 25,4% de los votos con el que triunfó en los comicios del 21 de diciembre de 2017, que le dieron 36 escaños, de los que en torno a dos terceras partes ahora están en jaque.
Carrizosa y Lorena Roldán (candidata de Cs en Cataluña hasta que fue relevada por Carrizosa este pasado agosto) son los políticos peor valorados en la comunidad, según el CIS. Ambos han tenido una puntuación de 2,6 sobre 10 en la sección de valoraciones, siendo el líder del PP catalán, Alejandro Fernández, el siguiente con una peor nota (2,9 sobre 10).
Al otro lado de la balanza, Oriol Junqueras es el líder político más apreciado en la comunidad: es el único que aprueba, aunque por la mínima, con un 5,3.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa (4,9); el portavoz de los comuns en el Congreso, Jaume Asens (4,6); y la líder de los comuns en el Parlament, Jèssica Albiach (4,2) son los otros dirigentes mejor valorados en Cataluña.
Declive del PP y ¿entrada de Vox al Parlament?
La encuesta del CIS de noviembre también trae malas noticias para el PP catalán. Los populares seguirían perdiendo importancia en Cataluña si los resultados que arroja el barómetro se replican el 14 de febrero. Y es que, tras conseguir el 4,2% de los votos y 4 escaños en 2017, según este sondeo al PPC ahora solo le votaría el 2,1% del electorado. Sumando la simpatía, alcanzaría el 2,9%.
La caída tanto de Cs como de PP se debe mirar desde otra arista fundamental: Cataluña Suma. Los naranjas han intentado en los últimos meses convencer al PP de que conviene ir juntos a las elecciones catalanas, pero los populares han mostrado dudas después de que la alianza probase insuficiente en los recientes comicios vascos. El nombramiento de Carrizosa como candidato de Cs tampoco convenció a Alejandro Fernández.
Otro asunto sobre el que hay cierta expectativa es si Vox logrará entrar al Parlament. Serán las primeras elecciones catalanas a las que concurrirá el partido de Santiago Abascal, cuyo candidato a la Generalitat es Ignacio Garriga. Según el CIS, el 1,3% de los catalanes le votaría, y si se suma la simpatía su expectativa sube al 1,4%. Esto podría ser insuficiente para conseguir al menos un escaño en la Cámara catalana.
Junqueras, Puigdemont e Iceta, los favoritos
El exvicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, es el líder político favorito de los catalanes, según el CIS. El 19,1% de los entrevistados ha manifestado que sería su preferido para presidir la Generalitat, frente al 15,2% que dijo lo mismo de Carles Puigdemont. El primero está en la cárcel y ha sido condenado por sedición en el juicio del 1-O, y el segundo huyó de España hace tres años para sortear ese mismo juicio.
Miquel Iceta es el tercer favorito. El líder del PSC ha sido elegido como presidenciable por parte del 13,8% de la muestra. Solo él, Junqueras y Puigdemont han superado el 10% en esta pregunta. Salvador Illa, que no se presentará a las elecciones, es el cuarto favorito, con un 3,6% de fans. Y a Carrizosa le ven como president tres de cada cien entrevistados por el CIS.
Pere Aragonès, el vicepresidente del Govern en funciones de president desde el cese de Quim Torra, sería el favorito a la Generalitat solo del 1,1% de los encuestados. Torra le supera, con un 1,8%. Esta misma muestra ha calificado en términos negativos la gestión del Ejecutivo catalán en los últimos años, y en mejores términos la de Aragonès en los últimos meses.
Finalmente, estos son los tres principales problemas de Cataluña según los ciudadanos consultados por el CIS: la independencia (el 23,5% dijo que es el primer problema de la región), la Covid-19 (el 17,4%) y la crisis económica (el 11,8%).