Costas defiende un pacto del Estado con Cataluña sin tocar la Constitución
El presidente saliente del Círculo de Economía, que da paso a Brugera, insiste en abordar también una "dieta de equidad y de competencia empresarial"
El presidente del Círculo de Economía, Antón Costas, deja el cargo. Ha acabado su mandato y cede el puesto a Juan José Brugera. Y lo hace con una defensa clara de un pacto entre el Gobierno central y Cataluña que sea ratificado, posteriormente, en Cataluña a través de una consulta. ¿Un referéndum como el que pide el Gobierno catalán? No, aunque el Círculo no se niega si fuera legal y acordado, pero el objetivo es que se pueda resolver el problema catalán a través de la negociación «y sin reformar la Constitución».
Esa es la idea que desea transmitir el Círculo, desde la convicción de que «sería un error, un mal camino, pensar que todo se arreglaría con una reforma de la Constitución», a juicio de Antón Costas. Hay otras fórmulas, apuntadas en los últimos meses por Miquel Roca o Herrero de Minón, que pasan por acuerdos en el Congreso, con reformas de leyes orgánicas, que posibilitaran un pacto. Ahora bien, ese acuerdo debería ser refrendado mediante una consulta en Cataluña. Es una fórmula que ha defendido también el ex presidente Artur Mas, como una vía alternativa a un referéndum de autodeterminación: si el Gobierno tiene una oferta, que la presente, pero después deberá ser votada en Cataluña. Es decir, que cualquier salida debería pasar por una votación en Cataluña.
Rechazo a otro 9N
Antón Costas considera que se ha abierto un nuevo horizonte con la disposición del Gobierno del PP a dialogar. Eso choca, sin embargo, con el objetivo del Gobierno catalán de organizar un referéndum para antes del verano, que podría ser similar al 9N que se celebró en 2014. Para Costas eso no tendría mucho sentido. «Eso ya se hizo, y no veo en qué podría ser ahora diferente, que aportaría al 9N», ha asegurado.
En esa misma línea se ha pronunciado Brugera, que recoge la herencia del mandato de Costas con la misma filosofía: buscar consensos, alejarse de los extremos, sin rechazar la posibilidad de una reforma de la Constitución.
El cambio en la junta directiva del Círculo, sin embargo, deberá servir para que el lobby empresarial centre todos sus esfuerzos en las cuestiones más netamente económicas. Ese es el deseo del propio Costas, que se mantendrá como vocal en la Junta de Brugera, que tendrá cuatro vicepresidentes: Marc Puig, Teresa García-Milà –la primera mujer con esa responsabilidad en la historia del Círculo– Jordi Gual y Juan José López Burniol.
Contra los monopolios
Brugera ha defendido que la economía catalana debe avanzar hacia un marco de mayor competitividad, y que el empresariado no está monopolizado sólo por el turismo y la construcción. El presidente de Colonial ha insistido en esa «necesaria competitividad» debe ir acompañado con planes para «reparar las fracturas sociales».
Ha sido Costas quien ha profundizado en ello, al defender dos «dietas», la «dieta de la equidad y de la competencia», al entender que la desigualdad puede acabar desligitimando la democracia y el sistema de libre empresa. Respecto a la segunda dieta, como ha denunciado a lo largo de su mandato, se trata de remediar «una tendencia hacia los oligopolios y los cárteles en el conjunto de la economía que resta renta disponible a muchas familias». Según Costas, «la monopolización creciente de muchas actividades resta dinamismo a la economía y disminuye la renta disponible de los consumidores a través de precios monopolistas. Las políticas públicas empresariales no deben ser ‘market friendly’, no ‘business friendly'», ha añadido.