Los sanitarios destrozan la gestión del Govern: «No han previsto nada»
Los médicos declaran falta de confianza en el Departamento de Salut después de la falta de previsión y de medios para controlar los rebrotes de Lleida
Cataluña reportó 774 enfermos por coronavirus el pasado viernes y, según los sanitarios, esto ocurre porque no se está gestionando bien la pandemia. Después de que el Govern catalán reclamara al Gobierno de Pedro Sánchez llevar las riendas durante meses de la crisis sanitaria, ahora parece que se le está yendo de las manos.
El brote de Lleida es el ejemplo más claro. El pasado viernes, la consellera de Salud, Alba Vergés, indicaba que “de momento” no se planteaba confinar la zona del Segrià, mientras que horas después ya lo había hecho. Los médicos de la zona ven esto como una improvisación y aseguran que hay falta de confianza en el equipo del Departamento de Salud.
«No han tenido previsión de nada. Se veía, desde Sant Joan, que no íbamos bien. Se precipitaron en abrir: en dos horas pasamos de la fase 2 a la normalidad”, protesta un médico rural leridano a El País. A día de hoy, ya se suman una veintena de brotes en Lleida, que han obilgado a confinar a los 210.000 habitantes de la comarca del Segrià.
El sector sanitario también acusa la falta de un responsable de Salud Pública desde la marcha —por motivos de salud— de Joan Guix. Mientras el Govern espera un substituto, se ha desplegado una unidad de seguimiento de la Covid-19 para “simplificar procesos y mejorar la coordinación”. Al frente de esta unidad se encuentra Jacobo Mendioroz, un epidemiólogo “muy preparado y bien formado, pero sin experiencia en gestión”, según coinciden distintas voces sanitarias.
El mayor problema según los sanitarios, sin embargo, está en la falta de medios y los fallos a la hora de realizar un buen rastreo. Las directrices son confusas. Teóricamente, la atención primaria detecta, Salud Pública rastrea y el call center hace seguimiento de los contactos sanos.
Los profesionales reclaman refuerzo de personal
Sin embargo, los primeros se encuentran desbordados y no dan abasto en sus nuevas funciones; los segundos están bajo mínimos por la cantidad de casos exponenciales; y los terceros están esperando que se desatasque lo demás. Ante esta situación, los profesionales reclaman refuerzo de personal, coordinación y comunicación eficaz con Salud Pública, además de líneas claras de actuación.
“Hay que buscar el virus, no esperarlo”, insisten los médicos. En el call center, por ejemplo, se debería monitorizar la cuarentena de los contactos sanos, pero el 60% de los positivos aparecen sin contactos estrechos que monitorizar. La previsión era de siete personas por caso positivo.
Pese a las numerosas críticas, el Govern se niega a hacer autocrítica. Vergés insistió el miércoles en que llevaban semanas trabajando en un plan de acción para la campaña de la fruta y para la prevención en las empresas. El pasado viernes, los casos en el Segrià superaban el millar y había 12 brotes activos en empresas frutícolas.
