CCOO asegura que las tractoradas de agricultores son «básicamente» de empresarios

El secretario general de CCOO, Unai Sordo, destacó este martes que las tractoradas del sector del campo que están dificultando el tráfico en algunos puntos de España son protestas «básicamente» de empresarios y «muy minoritarias», aunque aclaró que ello no le resta «legitimidad», ya que en una parte de sus reivindicaciones tienen «razón».

Así lo manifestó Sordo en una rueda de prensa en la que se presentó un estudio sobre brecha salarial realizado por el sindicato. A su juicio, «todo lo que tiene que ver con las políticas agrarias trasciende de un Estado» y pasa al seno de la Unión Europea.

En este sentido, explicó que «la cuestión de fondo es cómo se hace compatible» una defensa del sector primario español y europeo con las exigencias de carácter sanitario, medioambiental y de condiciones laborales que no se exigen cuando se importan productos de países de fuera de la UE. «Aquí quienes se están manifestando tienen una parte de razón no menor», sostuvo.

De este modo, defendió que Europa «tiene que exigir que los terceros países tengan unos mínimos de cumplimiento de una serie de normas», ya que si solo se pide a productores españoles y europeos, se produce una «especie de competencia desleal».

Eso sí, avisó a los agricultores de que si también pretenden imponer una política «proteccionista» y «autarquista» él discrepa, pues sería «buscar un mercado cautivo para repercutir precios sobre los ciudadanos».

Bastante habitual

Sobre el tipo de protestas, Sordo reconoció que «es una práctica bastante habitual utilizar la contundencia de los tractores o las cosechadoras para, más que paralizar el tráfico, ralentizarlo». No obstante, afirmó que quienes se movilizan no son trabajadores por cuenta ajena, sino empresarios con sus propias reivindicaciones.

Al hilo, criticó que el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, se haya reunido recientemente con patronales del sector pero no lo haya hecho con los representantes de los trabajadores.

Unos empleados que, en opinión de Sordo, trabajan en muchos casos en «condiciones de explotación» para unos empresarios que se «oponen» a las subidas del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y que, cuando este se revaloriza, llegan a plantear que se aumenten las horas de la jornada laboral.

De hecho, explicó que «son decenas de miles» los españoles que se van a trabajar cada año a la vendimia francesa, por lo que se preguntó si los empresarios del campo en España no encuentran suficientes empleados por las condiciones precarias que ofrecen.