El Senado reprueba a Bolaños gracias a la mayoría absoluta del PP
Por 149 votos a favor y 114 en contra, el Senado reprueba al ministro de la Presidencia Félix Bolaños por "tergiversar" un borrador del informe de la Comisión de Venecia sobre la amnistía
En la sesión plenaria del Senado celebrada este miércoles, se aprobó una moción de censura contra el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, presentada por el Partido Popular, que cuenta con mayoría absoluta en la Cámara Alta.
La moción fue respaldada por 149 votos a favor, 114 en contra y una abstención, de un total de 264 votos emitidos, según informó el presidente de la institución, Pedro Rollán.
Durante el debate en el Senado, el senador del Partido Popular, Antonio Silván, justificó la moción para censurar a Félix Bolaños, citando sus declaraciones sobre la naturaleza representativa del Senado y sus funciones dentro de las Cortes, así como por su supuesta divulgación y distorsión del contenido confidencial del borrador del informe de la Comisión de Venecia sobre la ley de amnistía.
Silván acusó a Bolaños de sostener que «la soberanía nacional reside en el Congreso, y el Senado es solo la representación de los territorios», argumentando que esto refleja «una falta de respeto a las instituciones» por parte del Gobierno socialista.
Respecto a la filtración del borrador de la Comisión de Venecia, el senador del Partido Popular atribuyó a Bolaños «daño reputacional a España al filtrar y manipular el borrador», y criticó a los miembros del partido socialista, señalando que «manipular el contenido del borrador del informe y mentir en interés personal, al servicio de un encubridor y en interés de un prófugo es políticamente indecente».
La polarización política
Durante las intervenciones de los portavoces, Paloma Gómez Enríquez, de Vox, expresó el respaldo de su grupo a la censura de Bolaños «por su lamentable comportamiento» y por «distorsionar obstinadamente el contenido confidencial del borrador del informe de la Comisión de Venecia sobre la propuesta de la Ley orgánica de amnistía».
El senador socialista Antonio Magdaleno cuestionó la estrategia del Partido Popular, preguntándose «hasta dónde quieren llegar con su estrategia de generar controversia, deslegitimar las instituciones y polarizar la política». Acusó al principal grupo en el Senado de no reconocer «la legitimidad del presidente Sánchez y el resultado de las elecciones generales», y afirmó que el PSOE no se sumará «a esta estrategia de agitación que el PP lleva a cabo en cada sesión plenaria».
«Prepárense, porque vamos a seguir con políticas progresistas, un Gobierno progresista y el ministro Bolaños durante mucho tiempo, ya que así lo han decidido la mayoría de los ciudadanos», concluyó.
Por su parte, el senador de ERC Josep Maria Reniu i Vilamala lamentó que con la moción «estamos dando una imagen lamentable», y consideró que tanto el PSOE como el PP son responsables de no haber abordado reformas para que el Senado se ajuste «adecuadamente a un Estado plurinacional, en un contexto de Estado autonómico».
Reniu i Vilamala criticó al PP por no preocuparse ni ocuparse de esta cuestión: «No solo utilizan el Senado como un arma política para atacar a todos y a todo, sino que manipulan descaradamente su funcionamiento, cambiando el Reglamento sin ningún tipo de diálogo o negociación, imponiendo sus intereses partidistas y egoístas, lo que constituye un claro ejemplo de filibusterismo parlamentario».
Ataques a Cataluña
La senadora de Junts, Teresa Pallarès Piqué, criticó al PP por utilizar la institución de manera «partidista», señalando que, a pesar de estar en una cámara territorial, el PP suele mencionar a Cataluña, pero no para abordar temas como la sequía, la necesidad de inversión en infraestructuras, el expolio fiscal, la financiación o el «blindaje» de la lengua catalana, sino «únicamente para atacar a Cataluña».
Por su parte, Estefanía Beltrán de Heredia del PNV, argumentó que la moción de reprobación a Bolaños no busca fortalecer el papel del Senado como cámara territorial, sino demostrar el poder del PP en contraposición al Gobierno, utilizando la Cámara Alta «como su feudo particular».
Uxue Barkos, de Geroa Bai, expresó que el enfoque del PP en sus conflictos con el PSOE en el Senado terminará debilitando su posición parlamentaria. Afirmó que reprobar al Gobierno repetidamente tendrá poco impacto más allá de titulares temporales.
Carla Delgado, senadora de Más Madrid, ironizó sobre la solicitud del PP a la Comisión de Venecia para obtener un informe sobre la ley de amnistía. Señaló que el resultado fue contrario a las expectativas del PP, ya que el organismo europeo no respaldó sus posturas radicales y fundamentalistas.
Delgado instó al PP a ser serios, recordando episodios en la historia donde leyes progresistas fueron aprobadas a pesar de la oposición conservadora, siendo luego utilizadas por estos últimos. Concluyó enfatizando que las leyes progresistas son respaldadas por una amplia mayoría social y que, finalmente, son los conservadores quienes las utilizan y luego lamentan su aprobación.