Barcelona volverá a abrir hoteles: Collboni finiquita la norma ‘antiAirbnb’ de Colau
La nueva propuesta respaldada por el alcalde de Barcelona allana el camino para la apertura de hoteles y "hogares compartidos", revirtiendo la política restrictiva anterior
En enero de 2017, Colau aprobó el Plan Especial Urbanístico de Alojamiento Turístico (Peuat), imponiendo restricciones a la construcción de nuevos hoteles y a la apertura de pisos turísticos en el centro de Barcelona. Ahora, la proposición de Junts, respaldada por el PSC, propone modificar el Peuat para permitir tanto los hogares compartidos como proyectos singulares de hoteles en las zonas más turísticas de la ciudad.
La propuesta, liderada por el concejal de Junts Damià Calvet, ha recibido el apoyo del PSC, PP y Vox, mientras que BComú (Colau) y ERC se manifestaron en contra. El acuerdo allana el camino para que Barcelona permita el registro de «hogares compartidos» bajo los términos del decreto ley 75/2020 de la Generalitat, eliminando la necesidad de licencia de vivienda turística para compartir hogar.
Esta decisión representa un giro a favor de plataformas como Airbnb, que anteriormente enfrentó sanciones bajo el mandato de Colau. Desde el PP destacan que la medida beneficia a «vecinos que quieren disponer de su propiedad para hacer frente» al elevado coste de vida, ha explicado el concejal Juan Milián.
Vox también se ha sumado a la proposición porque defiende que este tipo puede suponer para las familias un «refuerzo para su maltrecha economía, intención nada recriminable que no debemos perseguir», ha dicho el concejal Liberto Senderos.
La gestión de Colau: «Un ataque al sector inmobiliario»
Calvet defiende la modificación del Peuat como un paso hacia la gestión en lugar de la prohibición, criticando la gestión ideológica de los últimos ocho años como un «ataque al sector inmobiliario».
Bonet ha valorado el Peuat como «una herramienta muy útil» para controlar la actividad ilegal en los pisos turísticos y ha celebrado la nueva regulación de la Generalitat.
Ha añadido que tendrán que adaptar la regulación a la realidad de Barcelona y ver la afectación en la ciudad, y por eso ha agradecido «a Junts la transacción de excluir la reflexión de modificar» el Peuat en tres meses.