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Antonio Resines coge ‘la carretera secundaria’: pide el voto para Izquierda Española
Numerosas figuras del mundo de la cultura, la universidad y la política firman un manifiesto pidiendo el voto este domingo para Izquierda Española
Destacadas figuras del mundo de la cultura y la universidad, entre las que se encuentran el director, productor de cine y cocinero José Luis García Berlanga, hijo del afamado director Luis García-Berlanga, o el director Jonás Trueba, reciente ganador del premio a mejor película europea en Cannes, han publicado un manifiesto en el que reivindican que «es el momento de Izquierda Española» dado que es el único partido que lucha porque deje de haber «europeos y españoles de primera y de segunda”.
Izquierda Española, que se presenta por primera vez a unas elecciones este domingo liderado por el abogado Guillermo del Valle, se ha caracterizado por ser un partido socialdemócrata crítico con los pactos de PSOE, Podemos y Sumar con los nacionalismos.
Encabeza la lista de firmantes el actor Antonio Resines, que ya había sido crítico en varias intervenciones con el gobierno por sus pactos con los nacionalistas y, en concreto, con la amnistía. De la misma forma que la película que lo encumbró en 1997, el actor español opta por un voto menos transitado hasta la fecha, el de la nueva formación de izquierdas crítica con las alianzas de PSOE y Sumar con fuerzas nacionalistas.
Además de Resines y Berlanga, entre los firmantes se encuentran catedráticos y profesores de universidad como Pablo de Lora, Jahel Queralt, Juan Antonio García Amado, Francesc de Carreras o José Errasti.
A las personalidades del mundo de la cultura y la universidad, se unen numerosos históricos de izquierdas como Martín Seco, Vargas-Machuca, Eduardo Sotillos, Medina Precioso o María Muñiz de Urquiza.
Tanto Resines como el resto de firmantes apuestan por la alternativa de izquierdas que representa Izquierda Española, un partido capaz de liderar una nueva política por una España y una «Europa más social, más democrática y más autónoma» para la cual la actual izquierda «populista o servil» no es la solución.