Alemania veta los viajes a España hasta finales de septiembre
Las autoridades alemanas evaluarán el 30 de septiembre si mantienen las restricciones para visitar España por los rebrotes de coronavirus
Alemania estudiará a finales de septiembre si España debe continuar como un territorio marcado en rojo para sus ciudadanos como consecuencia de la pandemia del coronavirus. No será hasta dentro de tres semanas cuando las autoridades sanitarias del país teutón evaluarán de nuevo la situación epidemiológica del país.
El Gobierno alemán decidió ya a mediados de agosto incluir a España como un destino de riesgo para sus habitantes, desautorizando cualquier tipo de viaje. Como consecuencia, todos los ciudadanos alemanes que hayan visitado el país deberían cumplir una cuarentena y presentar una prueba PCR a su regreso.
Únicamente las Islas Canarias, uno de los destinos por excelencia de los turistas alemanes, se salvaron de las restricciones sanitarias. Antes de llegar a este punto, territorios como Aragón, Cataluña, Navarra, Madrid o el País Vasco ya habían sido vetados.
La decisión fue tomada por el Instituto Robert Koch (RKI), el principal organismo de gestión de la pandemia en Alemania. Ahora, se ha marcado el 30 de septiembre como fecha para revisar la alerta, país por país.
Alemania empezó a imponer restricciones a mediados de junio, aunque ha ido levantando progresivamente los avisos en algunas zonas del mundo con el paso del tiempo. La medida busca evitar la propagación del coronavirus y ofece a los viajeros la posibilidad de cancelar gratuitamente sus reservas turísticas.
Una veintena de países han impuesto restricciones a España
La segunda oleada de coronavirus ha provocado que cerca de una veintena de países del espacio Schengen de libre circulación hayan dispuesto restricciones o cuarentenas a sus ciudadanos para visitar España durante sus vacaciones. Algunos, como Alemania, incluso solicitan la presentación de una test negativo de la enfermedad. Un golpe que ha sentido especialmente el turismo.
El último país europeo en sumar sus restricciones ha sido Bélgica, que a principios de septiembre incluyó a España en su lista de zonas de riesgo. El Gobierno belga prohibió a todos sus habitantes visitar el país, a no ser que fuera por una causa justificada. La medida provocó la cancelación de los principales vuelos y obligó a operadoras turísticas como TUI a poner en marcha un plan para repatriar a más de 2.000 turistas. De nuevo, Tenerife fue la única zona del país que se libró de las prohibiciones, aunque permanece con la etiqueta naranja de riesgo para contraer el coronavirus.
El Gobierno teutón analizará entonces si la situación epidemiológica es