Vacuna Covid | Pfizer vs Sputnik: ¿quién demostró más eficacia?
Con apenas horas de diferencia, Pfizer y el centro ruso Gamaleya anunciaron vacunas de coronavirus con más del 90% de eficacia, pero con datos disímiles
Este pasado lunes 9 de noviembre ha sido calificado de día «histórico» por científicos y farmacéuticos de todo el mundo, debido a los avances anunciados en dos vacunas de Covid que serían eficientes en más del 90% de los casos.
Primero fueron la farmacéutica estadounidense Pfizer y la empresa alemana de biotecnología Biontech quienes aseguraron, a primera hora del lunes, que su vacuna contra el coronavirus tendría una eficacia de más del 90%, según los resultados preliminares de un laboratorio independiente que aún no han sido revisados por otros científicos.
Al cabo de unas horas, cuando el planeta entero comentaba con alto optimismo la noticia de Pfizer, un oficial del Ministerio de Salud de Rusia aseguró en un comunicado que la vacuna Sputnik V, desarrollada en el instituto ruso Gamaleya, también tenía una eficacia superior al 90%.
Rusia —que en agosto se convirtió en el primer país del mundo en registrar una vacuna, en medio de preocupaciones de seguridad— lo confirmó oficialmente el martes. La vacuna Sputnik V tendría un 92% de eficacia, aseguran sus fabricantes, aunque con información pública mucho más limitada que la de Pfizer y Biontech.
La sede de la farmacéutica Pfizer en Nueva York | EFE/EPA/JL/Archivo
Pfizer fue más prudente que Rusia
Pfizer esperó hasta que 94 de los casi 39.000 voluntarios de su ensayo clínico de fase 3 que ya han recibido las dos dosis de la vacuna se infectaran de coronavirus antes de anunciar un porcentaje de eficacia superior al 90%. Su total de voluntarios es 44.000 pero 5.000 aún no han recibido la segunda dosis.
El supuesto 90% de eficacia, por cierto, es un porcentaje que sorprendió incluso a los científicos más previamente optimistas, pues es poco usual que una vacuna sea tan eficiente. Lo mismo sucedió en ese sentido con las noticias llegadas desde Rusia, aunque hay menos certezas de Sputnik V.
La mitad de los voluntarios del ultimo ensayo de Pfizer y Biontech recibieron la vacuna y la otra mitad un placebo. Para confirmar una eficacia de más del 90%, menos de diez voluntarios entre los que 94 que se infectaron recibieron la vacuna, y los demás contagiados recibieron un placebo.
«No se necesitan demasiados análisis estadísticos sofisticados para demostrar que esto es profundamente impresionante», ha explicado a la agencia Reuters David Spiegelhalter, profesor de la Universidad de Cambridge especializado en riesgo y estadísticas.
Rusia fue menos prudente que Pfizer en este sentido. El supuesto 92% de eficacia de la vacuna Sputnik V se anunció con apenas 20 contagiados de los 16.000 voluntarios de la etapa final de sus ensayos clínicos que han recibido dos dosis. Gamaleya aspira a finalmente contar con 40.000 voluntarios.
De las 16.000 personas del ensayo de la vacuna rusa, en torno a un 25% recibieron el placebo. La mayoría de los 20 contagiados habrían recibido el placebo para confirmarse una eficacia del 92%, pero otro problema es que ni el Instituto Gamaleya publicó una nota de prensa. No hay muchos datos ni se conoce el protocolo.
«El mundo científico cuestiona [el estudio ruso] porque no se conoce el protocolo y, en segundo lugar, el Fondo de Inversión Directa de Rusia, que es el que dio el dinero para este ensayo, anunció que luego continuarán los ensayos clínicos durante seis meses más», ha explicado a Infobae el médico neurólogo Conrado Estol.
Otro cuestionamiento común a Rusia es que en el comunicado ruso se informa de que ya se ha puesto la vacuna a unas 10.000 personas, algo «impensable» en países como EEUU, según declaraciones recogidas por El Mundo del científico español Javier Burgos.
Spuntik V, la primera vacuna rusa registrada contra la Covid-19 | EFE/EPA/SI/Archivo
¿Qué es lo normal en los ensayos clínicos de vacunas?
La novedad de la Covid-19 naturalmente ha acelerado los procesos de desarrollo de vacunas y hay decenas que se están estudiando y de las que pronto se sabrán resultados. Algunos detalles de estos ensayos no responden a protocolos homologados internacionalmente, por lo que será probablemente normal ver datos dispares de eficacia y de voluntarios infectados.
Algunos expertos dicen que lo ideal es que en un ensayo de decenas de miles de participantes se contagien entre 150 y 160 personas antes de dar datos sobre la eficacia de la vacuna. Pero esta es una regla abierta a la interpretación, informa Reuters.
«No existe una norma reguladora que requiera X número de eventos para tomar una decisión confiable. La cantidad de infecciones debe verse en relación con la enfermedad y su perfil de riesgo. Es más bien una evaluación caso por caso», ha explicado a esa agencia la Organización Suiza de Ensayos Clínicos.