Una escisión de Tsunami pide radicalizar el boicot al Clásico
Un sector independentista crítico con Tsunami Democràtic pide "volver a encender las calles" el 18-D y el día de Navidad
Un sector independentista crítico con las acciones de Tsunami Democràtic ha cobrado vida y se ha escindido. Se llama Lliris de Foc y amenaza con el retorno de los disturbios a Barcelona tanto para el Clásico Barça-Madrid del 18 de diciembre en el Camp Nou como para el día de Navidad, cuando ha convocado una manifestación que puede derivar en caos ante la Jefatura Superior de Policía en Via Laietana, escenario de fuertes tensiones entre independentistas radicales y cuerpos de seguridad el pasado mes de octubre por la sentencia del procés.
Una semana antes de esa manifestación del 25-D se jugará el Clásico entre el Fútbol Club Barcelona y el Real Madrid, que ya tuvo que cambiar de fecha porque la original chocaba con los disturbios de octubre. El partido es motivo de tensión para las fuerzas de seguridad y para el club azulgrana. Algunos directivos que han hecho declaraciones de forma anónima han lamentado que Tsunami Democràtic exija izar una pancarta con la leyenda ‘Spain, sit and talk‘ durante el encuentro: «Esto ha pasado de ser una revolución pacífica a una tocada de pelotas», ha dicho un miembro de la junta a este periódico.
De entrada, Lliris de Foc se desmarca del ‘Spain, sit and talk‘ de Tsunami Democràtic y de sus coacciones para que el Barça se posicione a favor de sus reivindicaciones durante el encuentro contra el Real Madrid, cuando se sospecha que los manifestantes incluso pueden invadir el campo. Así lo ha transmitido el grupo clandestino en su primer comunicado, difundido este jueves, en el que también ha explicado que nace con la voluntad de «volver a encender las calles», en alusión a las jornadas de altercados que se vivieron en Cataluña en protesta por las condenas a los líderes del 1-O.
Con la aparición de Lliris de Foc la situación podría desbordarse realmente. El grupo independentista se propone ocupar un espacio propio en la manifestación en la confluencia de las calles Cardenal Reig y Arístides Maillol, donde defenderá «con contundencia que la emancipación se gana, no se negocia». Lo hace, según el comuicado, «para liberar a los rehenes, hacer efectivo el mandato del referéndum y construir, sin dilaciones, un país democrático y justo para todos».
¿Disturbios en Navidad?
Hay motivos por los que llamar a retomar la «revuelta social», han asegurado en una convocatoria: no solo la sentencia del Tribunal Supremo sino también la de la «manada» de Manresa, los Centros de Internamiento de Extranjeros, y el «ascenso del fascismo, la represión y la brutalidad policial». Por ello han decidido renunciar a las celebraciones navideñas y así «denunciar tantas situaciones de injusticia y opresión». Lliris de Foc ha convocado una manifestación el 25 de diciembre en Via Laietana a las 18.30 horas y la salida de una «columna» hacia Meridiana a las 20.00 horas.
«Se llama a quien no quiera celebrar estas fiestas como si nada a sumarse a los pelotones vecinales, seguir con atención las redes y prepararse para este nuevo ciclo de acciones», reza el comunicado, que añade: «Es hora de volver a encender las calles y mantener con firmeza la movilización permanente hasta que haya cambios». También dice que «la ‘batalla de Urquinaona’ fue la primera victoria del independentismo desde 2017» porque la policía se vio «desbordada» por un pueblo que «supo ir más allá del Tsunami Democràtic«.
En ese sentido, piden al Caga Tío para Navidad gafas de protección, cascos de bicicleta, bufandas, punteros láser y mascarillas; una forma sutil de recomendar a los manifestantes que lleguen al lugar con estos artilugios.