El turismo se hunde en Barcelona: pisos vacíos y hoteles en quiebra

El sector turístico de Barcelona atraviesa su peor momento en décadas. El Gremi d’Hotelers de Barcelona ha avisado que la situación se ha vuelto «completamente insostenible» con actividad «prácticamente nula». La patronal hostelera ha valorado de «dramática» la campaña de verano y ha recordado que el 75% de los establecimientos han estado cerrados. 

A través de un comunicado, el director general del Gremi, Manel Casals, ha advertido de la casi inexistente actividad turística en Barcelona con cifras de ocupación hotelera que no habrían llegado ni al 10%: «La finalización de ayudas como los ERTE o las medidas extraordinarias para el pago de los alquileres pone en claro riesgo, a corto y medio plazo, la viabilidad de muchos establecimientos». 

La hostelería, consciente de que la situación no se revertirá a corto plazo, ha reclamado la ampliación y flexibilización de estas medidas a largo plazo​: «Como mínimo hasta que se constate una situación de estabilidad palpable que permita el desarrollo normal de su actividad». El Gremi también pide que se rescate con aportaciones directas a los negocios que generen más deudas. 

El sector se siente «desamparado ante la caída de ingresos» y ha lamentado que ninguna administración pública haya ajustado su política de impuestos ante el desastre de temporada veraniega. Además, han pedido a los gobiernos autonómico y central una comunicación «más exacta, continua, constructiva y pedagógica», tanto hacia la opinión pública nacional como internacional. 

Pisos turísticos: reducción del 62%

No solamente los hoteles sufren la crisis del turismo como consecuencia de las restricciones por los rebrotes de coronavirus en España. Más de 5.900 habitáculos de alquiler han dejado de prestar servicio de corta estancia desde que comenzó la pandemia y se han reconvertido al residencial. 

Esto se traduce en una reducción del 62% de oferta turística en la ciudad, según un estudio elaborado por la Asociación de Apartamentos Turísticos de Barcelona (Apartur), que estima que el sector necesitará un año para recuperarse y volver a trabajar con normalidad.

El presidente de la organización, Enrique Alcántara, ha defendido que el reto es mantener los 5.000 puestos de trabajo directos y los miles de indirectos que este polémico sector generó en 2019. Desde mayo, la cifra de pisos de Barcelona que han salido del circuito turístico ha crecido en más de 20 puntos, pasando del 40,6% (3.900) al 62% actual (5.900). 

Agencias de viajes

La situación no es mucho mejor en las agencias de viajes. La Unión Nacional de Agencias de Viajes (Unav) ha revelado una preocupante estadística: dos tercios de las agencias de viajes españolas podrían desaparecer si no se prolonga la vigencia de los ERTE flexibles por fuerza mayor hasta Semana Santa. 

El presidente de Unav, José Luis Méndez, ha pedido al Gobierno que entienda que los despidos temporales son una medida excepcional. La patronal ha asegurado que un trabajador, a partir del sexto mes, no puede pasar de cobrar el 70% de su salario al 50% «porque no se puede vivir con ese 50%».

En este contexto, la patronal de las agencias de viajes ha advertido de que algunos tour-operadores y agencias de viajes emisoras barajan acogerse al concurso de acreedores al no poder vender: «Por un lado, la demanda es menor para viajar por España y, por otro, hay una gran cantidad de hoteles y alojamientos turísticos que se están viendo abocados al cierre».