Torra frena a ERC con la mesa de diálogo y pide «garantías»

La portavoz del Govern, Meritxell Budó, torpedea su celebración inminente porque no ve garantías para un diálogo eficaz

Imagen de la primera reunión de la mesa de diálogo, el 26 de febrero de 2020 en Moncloa. De un lado de la mesa, Quim Torra y Pere Aragonès; del otro, Pedro Sánchez y María Jesús Montero. | EFE/KH

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

Quim Torra no tiene ni la mitad de prisa que ERC para recuperar la mesa de diálogo soberanista entre el Gobierno y la Generalitat. La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, exige antes «garantías» para que el órgano dé sus frutos y ha relativizado la urgencia expresada por los republicanos para retomar la negociación política con el Gobierno de Sánchez. 

JxCat y ERC vuelven a chocar así sobre la utilidad que puede tener esta mesa entre gobiernos, que se puso en marcha el pasado mes de febrero como contrapartida de Pedro Sánchez al apoyo de ERC a la investidura y que ha quedado suspendida por el coronavirus. 

Pere Aragonès hizo el pasado lunes hincapié en la importancia de que la mesa de negociación se vuelva a reunir «antes del 15 julio», algo que el Gobierno ha aceptado de forma privada. Pero Budó, siempre fiel a Quim Torra y a Carles Puigdemont, ha dejado en el aire su celebración afirmando que «en los próximos días se irá viendo cuál es la posibilidad» de que se ponga en marcha.

¿Otra vez con el mediador?

«El diálogo debe retomarse, debe ser un diálogo sincero y con una firme voluntad de encontrar una solución» al «conflicto político entre Cataluña y el Estado español», defiende Budó. La consellera también cree que se deben «tener todas las garantías para que este diálogo fructifique», algo que JxCat traduce a partir de la figura de un mediador

Otra cuestión que separa a los dos socios del Govern es el calendario electoral: mientras ERC aprieta a Torra para que ponga ya fecha a las próximas elecciones al Parlament antes de que el Tribunal Supremo pueda inhabilitar al president, JxCat no tiene ninguna prisa y pone todo el énfasis en la gestión de la crisis.

Budó ha asegurado que los miembros del ejecutivo catalán están «concentrados y centrados» en intentar capear la crisis sanitaria, económica y social derivada de la crisis surgida por el coronavirus. «Estamos trabajando en cómo reestructurar el presupuesto de 2020 para poder hacer frente» a esta crisis que está «golpeando fuertemente» al país, ha añadido.

Suscríbase a nuestro canal de Telegram para conocer la última hora sobre la pandemia del coronavirus en España, Europa y el mundo.
Economía Digital

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp