Quim Torra se rodea de díscolos para fingir transversalidad

El cantautor y exdiputado de Junts pel Sí Lluís Llach avanzó el martes que los integrantes del consejo asesor para un debate constituyente sorprenderían por su «transversalidad», pero el presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha nombrado finalmente este viernes finalmente a parte de sus miembros y no se puede decir que haya grandes sorpresas. 

Eso sí, la selección de Torra se basa en incluir a díscolos de otras formaciones para dar esa apariencia de pluralidad. A la cabeza, la ex del PSOE reciclada en opinadora proindependentista Beatriz Talegón tras reiterados choques con su partido, o el ex secretario general de Podem Albano-Dante Fachín, que también salió rebotado de su formación tras mantener agrios enfrentamientos tanto con la dirección nacional de Podemos como con la cúpula de los comunes.

También se integra en el consejo dos exdiputados de la CUP, el periodista Antonio Baños, que en su día fue fichaje estrella de los anticapitalistas, y la activista Gabriela Serra, aunque la formación anticapitalista ya se ha desentendido del organismo por considerarlo una pieza más del edificio retórico pero en el fondo autonomista en el que entienden los antisistema que está instalado el ejecutivo catalán. 

Siete exdiputados

La lista incluye también a una segunda exdiputada de los comunes, Àngels Martínez. En total, son siete los miembros que fueron diputados en el Parlament la pasada  legislatura, contando al propio Llach y a Carmina Castellví y Montserrat Palau, que también estuvieron integradas en el grupo parlamentario de Junts pel Sí.

El resto de integrantes son el abogado Jordi Domingo; los politólogos Jaume López Hernández y Albert Noguera; el economista Miquel Puig i Raposo, que fue director de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) de 2000 a 2002, y la socióloga Marta Rovira i Martínez.

Llach ha anunciado en Catalunya Ràdio que el consejo estará integrado por una treintena de personas, y que el resto de miembros los anunciará dentro de ocho días. Ninguno de ellos, pese a ser nombrados por el presidente de la Generalitat, recibirá ninguna remuneración pública, según insistió Torra el martes, cuando presentó junto a Llach el organismo sin aclarar ni su composición, ni su calendario, ni su modus operandi.

Sin el proceso constituyente anunciado por Torra

Lo poco que quedó claro, porque Llach insistió en ello por activa y por pasiva, es que con la creación del consejo no se activa ningún proceso constituyente, porque eso, dijo, le correspondería al Parlament. Es decir, desactivaba el relato de Torra, que desde que anunció la creación de un «foro constituyente» en su conferencia del 5 de septiembre, había dado a entender que el objetivo del mismo era acabar elaborando una suerte de constitución republicana. 

Ahora, esa expectativa se ha rebajado hasta el extremo de que Llach remarcó que el foro se limitaría a ser una suerte de proceso participativo o «debate nacional» para definir «qué país queremos», y para el que la Generalitat se pone como modelos la convención constituyente de Irlanda que desarrolló sus trabajos entre 2007 y 2009 y la National Conversation escocesa que entre 2012 y 2014 elaboró varios informes previos al referéndum de autodeterminación. 

De hecho, la finalidad del ente que preside Llach, según señaló también el cantautor, ni siquiera es crear ese foro. Tan solo hablar con la mayor cantidad posible de entidades para intentar que acabe siendo el tejido asociativo catalán el que, tarde o temprano, lo impulse.