PSOE y Podemos pugnan por presidir la ‘comisión Kitchen’ en el Congreso
Podemos teme que los socialistas presidan una "comisión light" por deferencia al Partido Popular
PSOE y Unidas Podemos quieren presidir la ‘comisión Kitchen’ que tendrá lugar en el Congreso de los Diputados. Ambos partidos acuerdan que la iniciativa que investigue el presunto espionaje del PP al extesorero Luis Bárcenas se cree antes de que finalice el año, según confirman fuentes socialistas.
Los portavoces parlamentarios de PSOE y Podemos, Adriana Lastra y Pablo Echenique, se reunieron este jueves por la tarde en el Congreso para hablar sobre la composición de la comisión, los partidos que participarán y las personas que deberán comparecer en la comisión que investigue la denominada ‘Operación Kitchen’ contra el PP.
La iniciativa se registró por ambas formaciones el pasado 10 de septiembre y aunque el Pleno acordó su creación en octubre, aún no se ha constituido. Hasta el momento sólo se había mantenido una reunión entre los socialistas y sus socios de Gobierno y de investidura, debido al «apretado calendario legislativo», cuentan los socialistas.
Fuentes parlamentarias desvelan a Economía Digital que, tanto Podemos como PSOE, buscan presidir esta comisión. También Ciudadanos se mostró a favor de presidirla, en un primer momento y para hacer de árbitro entre ambos partidos. Pero las fuentes consultadas insisten en que los socialistas se encuentran pactando con su socio, Podemos, presidirla ellos y tener a varios diputados en su composición.
Los dos partidos están de acuerdo en llamar a «todas las personas que puedan haber tenido vinculación directa» con el ‘Caso Kitchen’, incluida «buena parte de las direcciones que ha tenido el PP», dando a entender que se citará al expresidente del Gobierno y del partido, Mariano Rajoy y también al excomisario Villarejo. También se da por hecho que serán citados el exministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, su secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, y María dolores de Cospedal.
El punto de fricción: Pablo Casado
Sin embargo y según las fuentes consultadas, el punto de fricción entre las dos formaciones se encontraría en si llamar a declarar al líder del PP, Pablo Casado. Fuentes socialistas no ven necesario llamar a Casado para esta comisión.
El PSOE busca evitar este trance, ya que diputados y parte del Gobierno intenta poner fecha al pacto con los populares para reformar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Los de Pedro Sánchez todavía no han desechado la carta de la oposición a la hora de buscar nuevos socios, aunque el presidente siga sin descolgar el teléfono para llamar a Génova.
Unidas Podemos quiere sentar e interrogar a Casado para desprestigiar, aunque solo sea con la foto, a su oponente más directo en estos momentos. Los morados buscan que Sánchez corte los lazos con los populares y reformar el CGPJ sin el principal partido de la oposición, solo con los socios de investidura y en nada de Presupuestos.
Echenique dirigió este miércoles todas sus críticas contra la actual dirección del PP, señalando que “no hay que olvidar” que Casado “es presidente del PP con los votos de María Dolores de Cospedal”, a quien también situó en medio de la trama. Entiende que, “siendo la ‘Kitchen’ una política de partido y no un asunto de manzanas podridas, convendría” que Casado diga “qué ha hecho para limpiar todo aquello”.
Desde Podemos consideran que uno de sus diputados debería de presidir la comisión ante el temor de que los socialistas realicen una «comisión light» por deferencia a los populares, apuntan fuentes de la formación de Pablo Iglesias.
El PP: «No descartamos llamar a nadie»
Fuentes del PP siguen viendo la creación de esta comisión como una «persecución» al partido: «Como siempre hemos dicho, es una persecución al PP por parte de los partidos que sustentan el Gobierno».
Los populares recuerdan cómo el «rodillo parlamentario de Sánchez y sus socios» han «vetado» este año la creación de una comisión para investigar la presunta financiación irregular de Unidas Podemos y también una a cuenta del famoso ‘Delcygate’, referente a la visita de la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, y su recibimiento en el Aeropuerto de Barajas por el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, que, pese a ser archivado en España sigue investigándose en Bruselas.
Su portavoz parlamentaria, Cuca Gamarra, aseguró este miércoles que en su formación todavía no se ha analizado a quién van a proponer para comparecer, pero ha avisado: «No descartamos llamar a nadie».