El ascenso de Vox en las elecciones catalanas asusta a Pablo Casado
El presidente del PP, Pablo Casado, movilizará a sus 'barones' —Feijóo, Moreno Bonilla, Ayuso y Almeida— para arropar a Alejandro Fernández
El Partido Popular de Pablo Casado desplegará a sus principales cargos en Cataluña para neutralizar el ascenso de Vox en las elecciones catalanas.
Según ha podido saber Economía Digital, los populares piensan rodear la campaña que encabezará Alejandro Fernández con primeros espadas del PP con barones como Alberto Núñez Feijóo, Juanma Moreno Bonilla, Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez Almeida, así como figuras como la diputada electa por Barcelona Cayetana Álvarez de Toledo.
Casado, que está incrementando sus desplazamientos a Cataluña, regresará este viernes arropar a su candidato.
La semana pasada, el líder del PP visitó el Banco de Alimentos en Cataluña y se reunió con empresarios en Tarragona presentando a Fernández como la «alternativa moderada, sensata y transversal».
El partido también está planteando una precampaña sectorial, «basada en los problemas que preocupan a la gente», y no en los que ocupan a los independentistas, comentan fuentes de la dirección.
En Génova preocupa estos días el más que seguro ascenso de la formación de Santiago Abascal en Cataluña y, aunque los populares aseguran que «no nos van a adelantar», sí que están con los ojos puestos en el retrovisor porque, aseguran, «se quedarán cerca» el próximo 14 de febrero.
Las encuestas —y los partidos— dan por seguro que Vox va a irrumpir en el Parlament con grupo propio (al menos 5 diputados).
Ahí comienzan los nervios, pero la mayoría de voces del PP catalán son partidarios de encajar esta realidad y de no realizar demasiados movimientos bruscos. Opinan que hay que asumir que Vox va a entrar en el Parlament sí o sí y que no conviene entrar en una competición con los de Santiago Abascal.
El PP calcula que obtendrá entre 9-12 escaños
Según fuentes populares, sus previsiones contemplan que Vox obtendrá, como mucho, cuatro escaños por Barcelona y algún otro parlamentario en Tarragona y Lleida.
Sus cálculos dan al PP entre 9 y 12, y también auguran una gran debacle de Ciudadanos que, aseguran, puede incluso caer por debajo de los 12 diputados a pesar de haber ganado las últimas elecciones autonómicas con 36 escaños.
En el PP son conscientes de que los próximos comicios serán un un pulso más que se medirá en clave nacional para extrapolar conclusiones sobre todos los partidos de alcance español.
De ahí que los populares decidan desplegar toda su artillería y diseñen ya varios actos en los que Álvarez de Toledo no coincidirá con el líder del PP, Pablo Casado, según desveló ED.
Eliminar las embajadas catalanas
En el Comité de Dirección que el partido celebró este lunes se acordó que la bajada de impuestos esté entre los temas ‘estrella’ que los populares destaquen en campaña.
Los populares también defenderán la eliminación de las embajadas catalanas para quitar gastos superfluos a las cuentas de la Generalitat, según las fuentes consultadas.
La enmienda de ERC acordada con el Gobierno a cambio del ‘sí’ de los independentistas a los Presupuestos supone una subida de impuestos para las comunidades del PP o lo que los socialistas denominan ‘armonización fiscal’.
Sin embargo, desde ERC acusan directamente a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, de hacer ‘dumping’ fiscal e insisten en acordar con Sánchez un aumento fiscal para la capital.
Un asunto que los populares ya se están coordinando para pelear porque siempre ha sido una de sus medidas clave para ganar ciertas autonomías.
Casado quiere que el modelo del Partido Popular, que calificó de «modelo de éxito», se visualice con claridad en la campaña de las próximas elecciones autonómicas en Cataluña.
Alejandro Fernández hará bandera de la bajada de impuestos, como marca de la casa de su partido. Al mismo tiempo, defenderá que se recorten los gastos superfluos, como las «embajadas catalanas» de la Generalitat en el extranjero o el número de altos cargos y sus elevados sueldos.
La pelea por el centro
El Partido Popular tiene decidido centrar su lucha en la conquista del centro político rivalizando con PSC y Ciudadanos. Lo conclusión de la cúpula del partido es que «los votos están en el centro» y a por ellos irá esta campaña el PP.
Por ello y para su pulso con Ciudadanos, los populares apostarán por su programa más liberal, «apoyo a la propiedad privada y dinamizador de la economía». «No quiero estar en los extremos, no quiero estar con los radicales sino con aquellos a los que no les importan los logotipos ni los clichés ideológicos sino el empleo o la educación», dijo Casado.
La portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Cuca Gamarra, también introdujo cambios en su discurso de este lunes señalando que «el PSOE ha decidido dejar de ser el Partido Socialista para pasar a ser el partido única y exclusivamente de Pedro Sánchez».
Los populares buscan ahora aislar al «partido Sanchista» para ganarse a los socialistas críticos y molestos con la nueva deriva del partido, apoyándose en Podemos y en los independentistas y nacionalistas para sacar adelante los Presupuestos y apuntalar la legislatura.
Gamarra agitó, además, el manido «se rompe España» que los populares siempre suelen utilizar contra el Gobierno cuando está en manos de las fuerzas radicales. El hecho de que los Presupuestos vayan a ser apoyados por ERC o EH Bildu implica, en opinión de Gamarra, que los españoles lo paguen «a golpe de talonario» y para «romper España».
«El Gobierno le llama valentía y sinceramente no conozco mayor cobardía que vender España a trozos por un puñado de votos. No se es valiente cuando se pacta con Bildu y con los independentistas, que han promovido un golpe de Estado hace escasamente dos años», apuntó Gamarra.