Pesos pesados del PSC visitan a Junqueras en prisión
Antonio Balmón y Antoni Poveda, alcaldes de Cornellà y de Sant Joan Despí, visitan a los políticos presos durante cinco horas
Dos destacados dirigentes del PSC —el alcalde de Cornellà, Antonio Balmón, y el de Sant Joan Despí, Antonio Poveda— visitaron el pasado jueves a los presos independentistas en la cárcel de Lledoners. Durante las cinco horas que duró la visita se reunieron con Oriol Junqueras, Raül Romeva, Joaquim Forn y Josep Rull, según adelantó el diario Ara. Dos de ellas las pasaron con Junqueras.
Es la primera vez que dirigentes de peso del PSC van a visitar a los líderes del procés a prisión. Aunque el pasado marzo el diputado del PSC en el Parlament Carles Castillo visitó al exvicepresidente catalán Oriol Junqueras en la cárcel de Estremera (Madrid) y a la expresidenta del Parlament Carme Forcadell.
También Jaume Collboni, responsable de política municipal del PSC, se vio con Forn en mayo, con el que había coincidido un par de años en el Ayuntamiento de Barcelona.
Balmón y Poveda son dirigentes de larga trayectoria entre los socialistas catalanes y pesos específicos del partido. El primero es miembro de la dirección nacional del PSC y muy próximo al PSOE, y el segundo es el primer secretario del partido en el Baix Llobregat.
Iniciativa de Junqueras
La visita a los independentistas en prisión vino impulsada por la iniciativa del líder de ERC, que había hecho llegar a una persona que le gustaría reunirse con Antonio Balmón. También manifestó que le gustaría que acudiera Poveda en la medida de lo posible. El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, estaba informado de la reunión.
La conversación entre Balmón, Poveda y los presos fue cordial. En sus conversaciones, reflexionaron sobre la situación política actual y contrastaron opiniones. El tema central fue la situación actual que atraviesa Cataluña, sumida en un parón institucional y legislativo desde hace meses.
Los presos enviaron una carta a Xavier García Albiol e Inés Arrimadas, líderes del PP catalán y Ciudadanos respectivamente, para que fueran a visitarlos y comprobaran su situación en prisión. Ambos dirigentes habían denunciado que los líderes del procés tenían una situación «privilegiada» en la cárcel.