Millet: ''Ferrovial daba dinero a Convergència''

Fèlix Millet acusa a Convergència, el partido de Artur Mas, de cobrar dinero de la Constructora Ferrovial a través del Palau de la Música. Este dinero correspondía a comisiones por la adjudicación de obra pública. Así lo ha confesado Millet en su declaración como acusado ante el tribunal del caso Palau.

Una declaración contundente. “Esta es la verdad”, concluyó Millet: “Ferrovial donaba dinero a cambio que Convergència le diera obra pública”. Más claro, agua. Los intermediarios de CDC que trataron estos asuntos con el Palau fueron sus tesoreros: primero Carles Torrent, ya fallecido, y después Daniel Osàcar, que figura como imputado en esta causa.

Ferrovial pagaba una comisión del 4%. De este porcentaje, un 2,5% correspondía a Convergència y el 1,5% restante se lo llevaban Millet y Jordi Montull por gastos de intermediación, según reconoció Millet a preguntas del fiscal. En cambio, no preció si, de este 1,5%, él se quedaba el 80% y Montull un 20% tal como apuntó el ministerio fiscal.

“Yo cobraba de muchos sitios”, se justifica Millet

Millet también se ha referido al dinero que se llevó del Palau. “Yo cobraba de muchos sitios”, confesó Fèlix Millet ante el tribunal. Con sarcasmo, el fiscal Emilio Sánchez Ulled le contestó que “ya me he dado cuenta”. Efectivamente, Millet dispuso de importes millonarios de las entidades vinculadas al Palau de la Música para su provecho. No supo explicar de cuanto dinero se apropió.

Fèlix Millet reconoce que él mismo, Jordi Montull y su hija Gemma dispusieron de fondos de la Fundación Palau de la Música para su propio beneficio. Una parte de este dinero se destinó a obras en sus domicilios particulares. Millet subrayó que fue “un error mío brutal”.

Millet pide perdón por una cadena de “errores”

Millet también pidió “perdón” porque él y Jordi Montull se atribuyeron sin consultarlo a nadie unos incentivos retributitos, que llamó “bonus”, a cargo de la Fundación del Palau de la Música. Estos “bonus” se cobraron a través de empresas administradas por sus respectivas esposas. Para intentar dar cobertura a los incentivos que cobraron irregularmente, modificaron los estatutos de la Fundación. Millet volvió a entonar el mea culpa por este motivo.

Las bodas de las hijas de Fèlix Millet, Leila y Clara, se pagaron con fondos del Palau. Millet volvió a pedir perdón. No obstante, se justificó diciendo que así querían promocionar esta institución cultural para que albergase más actos sociales. No recordó cuanto costaron estas bodas. Los viajes familiares a exóticos destinos –Polinesia, Maldivas, Dubai…– se pagaron con dinero del Palau. “Me equivoqué”, dijo Millet, aunque añadió que quién organizó estos viajes fue Jordi Montull.