Los críticos de Ciudadanos recrudecen su ofensiva contra Rivera
Garicano reclama una rectificación a Ciudadanos para que busque un pacto con Sánchez, pero con "exigencias duras en Cataluña"
Ciudadanos continúa con su crisis interna debido a su negativa a facilitar la investidura de Pedro Sánchez. Uno de los críticos con Albert Rivera es Luis Garicano, el eurodiputado del partido naranja. Garicano defiende que la formación debe pactar con Sánchez. Eso sí, con «exigencias duras en Cataluña».
En una entrevista en El Mundo, Garicano concede que «es indudable que en Ciudadanos ha habido un giro en los últimos meses». Por este giro o acercamiento a la derecha de Rivera, dimitieron esta semana Toni Roldán y Javier Nart.
En la entrevista, Garicano se cuida de reconocer el acercamiento a la derecha y critica que «Sánchez rompió el bloque constitucional con la moción de censura». «Tras ella, C’s reaccionó exigiéndole que volviera a ese bloque constitucional. Y nos hemos alejado de él. Eso es absolutamente legítimo y lógico teniendo en cuenta los pasos que ha dado el PSOE», justifica.
Garicano, al contrario que Rivera, defiende que hay que tenderle la mano a Pedro Sánchez
Aún así, contradice a Rivera y se sitúa con aquellos de su partido que piensan que deben «tenderle la mano a Sánchez» y que «sea él el que la rechace».
Entre las exigencias que impondría al presidente del Gobierno en funciones están la «aplicación del Estado de Derecho en Cataluña», TV3, o «aplicar las sentencias del Tribunal Constitucional sobre la política lingüística».
«Cuatro años de un Gobierno con una mayoría muy amplia podrían permitir reconstruir muchas cosas», concede. De hecho, Garicano ve un posible Gobierno de coalicón: «gratis no podríamos dar nada».
Apoyo a Colau
Garicano admite que les habría gustado «echar a Pedro Sánchez de la Moncloa», pero que la aritmética les impide hacerlo. «Ahora hay ue hacer lo que sea mejor para España, sin duda», alega.
El eurodiputado, que ha decidido no responder a la pregunta de si ha pensado en dimitir, defiende que se siente «muy cómodo» en Ciudadanos y rechaza el pacto de PP y Vox para los ayuntamientos que garantiza la entrada del partido de Abascal en concejalías de Gobierno.
«Eso es incompatible con la decisión que adoptó la Ejecutiva de Ciudadanos», sentencia. Garicano también ha defendido que Ciudadanos votara a Colau para evitar que hubiera un alcalde independentista, como decidió hacer Manuel Valls antes de romper con el partido.
«A veces la política es la elección del mal menor. Estamos hablando de dos males muy grandes: entre una persona que quiere avanzar hacia la independencia y otra que se pone de perfil ante el independentismo».